Zacatecas, Zac. Este jueves se cumplen tres meses de que los integrantes de la sección 304 del Sindicato Minero, que dirige en el país el senador Napoleón Gómez Urrutia, estalló por acuerdo unánime de su asamblea la primera huelga legal de Minera Peñasquito, el enclave de oro y plata a cielo abierto más grande de México, propiedad de la estadunidense Newmont, compañía extranjera que ha controvertido y se niega a pagar el reparto del 10 por ciento de sus utilidades, como lo marca la ley.

Al cumplir 90 días las banderas rojinegras, colgadas de los diferentes accesos del gigantesco enclave que se ubica en el semidesierto del municipio zacatecano de Mazapil, la trasnacional estadounidense ha emprendido una campaña de linchamiento mediático, a través de sus perfiles oficiales en redes sociales, donde responsabiliza al Sindicato Minero y su huelga vigente, de las cuantiosas pérdidas millonarias –en dólares-, por la parálisis de la mina, lo que además, asegura la trasnacional, ya tiene un impacto negativo en su producción anual:

“¿Cómo ha impactado la huelga nuestras utilidades? Al 7 de septiembre de 2023, habremos dejado de operar y producir por tres meses completos. Esto nos ha hecho perder aproximadamente el 25 por ciento de la producción anual -398 mil onzas de oro equivalentes-, es decir, aproximadamente 472 millones de dólares menos de ingresos”.

Además, ha advertido Newmont, que ésta caída en la producción minera de su compañía en Zacatecas, repercutirá negativamente en el reparto de utilidades para el año 2024, pues simplemente, no habrá reparto de esta prestación de ley, para los más de 2 mil trabajadores sindicalizados de Minera Peñasquito, al explicar la razón, con una simple ecuación: “Ventas cero, ingresos cero, utilidades cero”.

A esta narrativa centrada en el reproche por las pérdidas económicas –no por la razón legal de la huelga que estalló legítimamente la sección 304 del Sindicato Minero, conforme reconocieron en su momento las autoridades laborales del país-, este miércoles se sumó a la narrativa de la trasnacional la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (AIMMGM), que emitió un comunicado de prensa, mismo que Newmont difunde en su portal oficial de Facebook.

En el texto, la AIMMGM exhorta a las autoridades del gobierno federal y, en específico a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, “a garantizar la legalidad en las relaciones de trabajo y el marco jurídico para que se levante la huelga, que el 7 de septiembre cumplirá tres meses, en la unidad Minera Peñasquito”.

Aunque ésta asociación, pidió llegar a una resolución legal, con el respeto irrestricto de los derechos de los colaboradores de Mina Peñasquito, sin embargo demanda que ante todo, “también se debe cumplir el Acuerdo de Negociación Colectiva que expresamente fue acordado, negociado y firmado por las partes en conflicto, en junio de 2022”, que es uno de los principales argumentos contra la huelga, por parte de Newmont.

“De mantenerse la inactividad de la minera se continuará afectando los ingresos de más de 5 mil familias de colaboradores y contratistas, así como 28 mil empleos indirectos que participan en la cadena de valor. México requiere mantener el empleo formal para el crecimiento económico y garantizar el cumplimiento del marco jurídico, para continuar siendo atractivo para las inversiones nacionales e internacionales”.

En tanto, la propia Newmont reiteró, que desde el comienzo de la huelga, el pasado 7 de junio, “nuestra prioridad ha sido proteger la seguridad de nuestra fuerza laboral, cumplir con la ley y el Contrato Colectivo de Trabajo (CTT) y buscar una solución que garantice la viabilidad de Peñasquito en el largo plazo”, y aseguró que las pérdidas diarias por el paro total del gigantesco enclave minero a cielo abierto, ascienden a los 3.7 millones de dólares al día.

“Como consecuencia de esta huelga, los resultados financieros de Peñasquito del segundo y del tercer trimestre en curso han sido gravemente afectados. En promedio, el impacto económico de la huelga para Peñasquito es de aproximadamente 1 millón de dólares por día en costos requeridos para mantener la suspensión de las operaciones, adicionales a 2.7 millones de dólares de ingresos perdidos por día”.

“De acuerdo con esos datos, nuestras proyecciones financieras indican que, debido a la huelga, al cierre del 2023 la empresa no arrojará utilidades, y por lo tanto no habrá utilidades para repartir a los trabajadores por este año fiscal”.

Por otra parte, este diario buscó a Nair Velasco Velasco, representante legal del Sindicato Minero en el país, para que fijara una postura a nombre de la sección 304, al cumplirse tres meses de huelga en Minera Peñasquito. Pero el abogado no respondió la solicitud, hasta el cierre de esta edición.