Ciudad de México. Por un día, el panista Juan Pablo Adame Alemán se convirtió en senador y desde la tribuna de esa cámara propuso un punto de acuerdo para demandar destinar mayores recursos a los enfermos con cáncer, que fue aprobado por unanimidad por todas las fuerzas políticas, que escucharon con emoción el discurso del joven legislador, a quien afecta esa enfermedad.
“Estoy aquí dando una batalla por mi vida. El cáncer volvió. He sobrevivido a tres cirugías, a once sesiones de quimioterapia y me faltan 13 sesiones, pero no me voy a detener, no me voy a rendir”, inició su discurso, entre aplausos de todos los senadores presentes en el recinto.
Adame Alemán es el suplente del senador perredista Miguel Angel Mancera, quién pidió licencia para dar oportunidad a que el panista pudiera ocupar su escaño durante la sesión de hoy, presentar el punto de acuerdo aprobado y una iniciativa que propone el apoyo económico para los familiares de los enfermos con cáncer.
Acompañado de su esposa, sus tres hijos y sus padres, resaltó: “Pido una reflexión pública en este momento para comprometernos más con los enfermos de cáncer, con la discapacidad que queda después de un tratamiento tan fuerte y con cómo podemos ayudar a cambiar esas historias que no tienen esta oportunidad”.
La iniciativa que presentó, dijo, busca atender ese drama, al dotar a la familia del enfermo de un apoyo de manera subsidiaria “para que puedan acompañar a sus familiares y lo puedan hacer en este momento en donde uno tiene que estar tomando quimioterapias y hay alguien que tiene que pagar un traslado, tiene que pagar un hotel, tiene que pagar la comida, tiene que pedir el día, tiene que renunciar a su actividad profesional para poder atender a un enfermo o a alguien que está con este padecimiento”.
Expuso que en su caso, se ha desempeñado en los últimos cinco años como secretario técnico del grupo del PAN, que le ha dado el respaldo necesario para atender su mal. Narró que como padre de familia al enterarse que tenía cáncer, el primer miedo que sintió fue perder el trabajo.
“Cinco años aquí en el Senado de la República, ¿cómo iba a enfrentar una situación así sin empleo? Si algún otro medicamento no lo pagaba el seguro, ¿de dónde iba a sacar el dinero? ¿Eli, mi esposa, iba a tener que salir a trabajar mientras yo estaba en quimioterapias?
Afortunadamente, recalcó, tuvo todo el respaldo y todo el apoyo,” pero sé que no todos los que padecen esta enfermedad puedan contar la misma historia. Hay experiencias inadmisibles donde un enfermo carga con el cáncer y con la necesidad de pagar el tratamiento y el acompañamiento.”.
De ahí, dijo, la importancia de que se apruebe esa iniciativa, toda vez que en México durante los últimos años los enfermos de cáncer han venido aumentando y es ya un problema de salud público, ya que trae severas consecuencias a quienes lo padecen, pero también “conlleva enormes cargas al entorno familiar”.
Expuso que “este cáncer con todos sus padecimientos me ha traído cosas buenas y me ha dado la posibilidad de disfrutar la vida de una mejor manera. Las sonrisas de mis hijos, María, Rodrigo, Inés que ustedes conocieron hace algunos momentos, los abrazos de Eli que le daba a mi cuerpo sin fuerzas. Las manos de mis papás cuando me daban su bendición”.
En igual tono, señaló: “Dejo ante ustedes mi historia, es o fue un diagnóstico inesperado que rompió cualquier plan a futuro, una señal para transformar mi vida en todos los aspectos, para enfocarme y dedicarle tiempo a lo importante”.
“¿Cuánto tiempo me queda?: no lo sé y nadie lo sabe, pero nunca me sentí tan vivo como cuando estuve cerca de la muerte, sentirla me hizo más consciente de cómo quiero vivir el resto de mis días”, concluyó el político de 35 años, en medio de un aplauso rotundo y unánime.
Una veintena de senadores entre ellos los coordinadores de Morena, PAN, PRI, PRD, PT, PVEM, Grupo Plural, le expresaron su solidaridad. Entre lágrimas, la senadora de MC, Verónica Delgadillo, lo felicitó por dar la pelea al cáncer y recordó que su padre falleció. Eres un guerrero, le decían.
Dada su situación se permitió que su familia estuviera en el pleno senatorial, entre ellos su padre, el ex gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame, visiblemente conmovido.
Tras la aprobación del punto de acuerdo que propuso para que el ejecutivo federal destine más recursos, para la prevención de este mal, Juan Pablo Adame salió del pleno senatorial entre abrazos y aplausos de senadores.