Andrea Martínez es el centro de atención después de convertirse en 2022 en la primera mujer en participar en una competencia de futbol americano colegial para varones.
Su hazaña marcó un antes y un después en la Liga Mayor de la Onefa.
De un momento a otro pasó a ser una de las piezas estelares de Pumas CU. Y no es para menos en un torneo que nunca se había permitido la presencia femenina en posiciones de cancha.
Los medios la asedian y los aficionados se acercan para pedirle una foto; ella no se inmuta y atiende a todos. Su año como novata fue histórico y se sintió arropada por el público y sus compañeros.
“Jamás me hicieron menos por ser mujer”, compartió la pateadora en la presentación del equipo. Fue todo lo contrario, asimiló. Sin distinción de género, hasta ahora sigue entrenando al parejo de sus compañeros, y eso lo agradece.
Lejos estuvo de sentir presión. “Más allá de ofuscarme por ser la primera mujer, tenía una responsabilidad con mi equipo, entregar resultados”. A las críticas hizo oídos sordos.
El respaldo que le brindó la afición es con lo que se queda. “Los enjuiciamientos siempre van a estar, mi enfoque estuvo en la gente que se acercaba a apoyarme, incluso cuando tuve partidos malos”.
Martínez Sánchez fue reclutada para conectar puntos extras. Su potencia en los pies viene de sus años como practicante del futbol. Gracias a sus virtudes en esta disciplina, los scouts vieron un diamante en bruto para acercarla al depor-te de las tacleadas.
No conforme, para esta segunda campaña, Andrea busca aumentar su rango de impacto, lo que implica un mayor grado de fortaleza en las piernas para pegarle al ovoide.
Quiere pasar de 20 yardas, distancia con la que se concretan los puntos extras, a 30 o más para pelear por un puesto con los pateadores de gol de campo.
“Eso ya lo decidirá el staff, pero me siento 100 por ciento segura. La competencia es conmigo misma. No me voy a poner a competir con los demás, porque sé que ellos tienen más fuerza”.
Sus retos no sólo pasan por lo deportivo. “Fue grato abrir puertas”, confiesa la alumna de la Fa-cultad de Derecho, cuando se refiere a la apertura que dio la Onefa con la presencia de mujeres. Sin embargo, no se conforma y pretende que más chicas puedan formar par-te de la Liga.
“Tengo esperanza de que más mujeres se unan. Y lo voy a hacer con resultados y mi esfuerzo, porque con palabras no lo voy a conseguir”, aseguró la número 49, quien ingresará al campo de batalla con esa encomienda, y su primer prueba serán las Águilas Blancas, este sábado, en el arranque de la temporada de futbol americano.