Oaxaca, Oax., Autoridades municipales de San Miguel El Grande denunciaron el secuestro de cuatro habitantes de esa localidad de la Mixteca, por pobladores de Llano de Guadalupe, perteneciente a Tlaxiaco, con quienes sostienen un conflicto por invasión de tierras. Al respecto, la sección 22 de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) demandó un alto “al clima de violencia en la entidad”.
En mayo pasado, residentes de Llano de Guadalupe emboscaron a habitantes de Guadalupe Victoria, comunidad San Miguel El Grande, con saldo de tres muertos y cuatro heridos como parte de un pleito por la posesión de mil 958 hectáreas.
El fin de semana, la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) ejecutó una orden de aprehensión contra uno de los presuntos responsables de la emboscada; en respuesta, ayer, habitantes de Llano Guadalupe privaron de la libertad a cuatro vecinos de San Miguel el Grande.
Los retenidos son Abimael Sánchez Quiroz de 17 años y José Ángel Sánchez Cruz de 19, ambos estudiantes del Centro de Bachillerato Tecnológico y Agropecuario número 77, así como Daniel Cuevas Sánchez, de 54 años, quien es chofer de un taxi colectivo, y del profesor Luis Ramírez Cruz, de 30 años.
Ante esta situación, fuentes de seguridad informaron que luego de la denuncia de secuestro, intervinieron la fiscalía, la Secretaría de Gobierno e instancias federales; al cierre de la edición, se confirmó la liberación de una de las personas detenidas. Fuentes de la fiscalía confirmaron a La Jornada que la retención de los lugareños fue en respuesta al arresto de Miguel Ángel MC, secretario del agente municipal de Llano de Guadalupe, acusado de participar en la emboscada.
Exigen a Salomón Jara frenar el clima de violencia
En tanto, la sección 22 de la CNTE recriminó al gobierno de Salomón Jara el “clima de violencia” que “trastoca la tranquilidad”. Precisó que a las 5:30 horas sujetos encapuchados detuvieron un taxi foráneo que se dirigía de Tlaxiaco a San Miguel el Grande, y sin mediar palabra se llevaron a cuatro personas; junto a ellas viajaba una maestra, a quien no le hicieron daño.
No obstante, la gremial consideró que sucesos como éstos “ponen en riesgo la vida e integridad de los trabajadores de la educación”, por lo cual exigió al gobierno estatal y a la fiscalía atender este problema.