El gobierno federal informó que a fin de aplicar la oferta educativa en el nivel superior, este año destinó 6 mil 774.7 millones de pesos a 460 proyectos de infraestructura para la creación de planteles o ampliar los ya existentes.
En el quinto Informe de gobierno destaca que esta inversión implica también equipamiento, rehabilitación y mantenimiento de instalaciones en prácticamente todos los subsistemas de educación superior.
Además, subraya que en el pasado ciclo escolar 2022-2023, las universidades públicas estatales presentaron el mayor incremento de la matrícula en relación con el ciclo escolar anterior, con 12 mil 371 estudiantes más.
Afirma que las escuelas normales y la Universidad Abierta y a Distancia de México, “por quinto ciclo escolar consecutivo, tuvieron un crecimiento en su matrícula equivalente a 4.3 y 5.7 por ciento, respectivamente”.
En cuanto al programa de Universidades para el Bienestar Benito Juárez García, que atiende a aspirantes a cursar educación superior que “han sido excluidos por razones económicas, sociales, geográficas, culturales y de condicionamientos” en la mayoría de las universidades públicas, su matrícula alcanzó 62 mil 775 alumnos en junio de 2022; además, cuenta con mil 369 docentes.
Agrega que tras la apertura de 52 nuevas sedes, en total se han creado 197 planteles en 31 estados, con excepción de Baja California Sur.
El gobierno federal explica que, debido a que su instalación se concreta a solicitud de las propias comunidades, las cuales deben donar un predio para su infraestructura y equipamiento, las sedes educativas “involucran a la población mediante la provisión de servicios de diversos colaboradores en las obras de autoconstrucción comunitaria”.
Por conducto de la coordinación general del programa, indica el quinto Informe de gobierno, se tienen convenios para la realización de prácticas escolares, comunitarias y profesionales con instituciones públicas que operan a escala comunitaria, municipal, estatal y federal, “por lo que es posible involucrar a los estudiantes en una relación estrecha, intensa y de aprendizaje continuo en los asuntos y problemas relativos a su formación”.
Al concluir sus estudios, enfatiza, los estudiantes realizan prácticas de servicio social y profesional en alguna de las instituciones públicas con que se tiene convenio y, al liberar el servicio, reciben una carta de reconocimiento.