La noche del viernes, con motivo del 50 aniversario luctuoso de uno de los más grandes y emblemáticos representantes de la música popular de todo el país, José Alfredo Jiménez (1926-1973), se revistió de gala a la canción ranchera, para ser interpretada por primera vez en formato sinfónico, en lo que fue el primero de dos conciertos en el Palacio de Bellas Artes.

El ambiente bohemio que provocan las canciones de José Alfredo se hizo sinfónico en el principal recinto cultural de México. No hubo bebidas “espirituosas”, pero sí se embriagaron y cautivaron las emociones y sentimientos de los asistentes.

Un grupo de 12 cantantes, siete mujeres y cinco hombres, integrantes del Estudio de Ópera del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal), incluyendo a la soprano María Katzarava, acompañados por la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), bajo la batuta de Ludwig Carrasco, interpretaron una selección de 20 canciones de las 300 escritas por el compositor guanajuatense, que para la ocasión se les hicieron arreglos sinfónicos, y de esa manera hacer lucir su música y letras.

El homenaje nacional en Bellas Artes a José Alfredo comenzó sin ninguna presentación. Sin mencionar el relevante motivo del concierto, ni quienes serían los jóvenes intérpretes. Así, uno a uno, en parejas o cuartetos, salieron a cantar los integrantes del Estudio de Ópera del Inbal, las memorables letras que normalmente vibran en las madrugadas de la bohemia.

Amanecí otra vez / entre tus brazos / Despertaste tú / casi dormida / Tú me querías decir / No sé qué cosa / Pero callé tu boca con mis besos / Y así pasaron muchas, muchas horas. Fue una de las canciones que se interpretaron por primera vez en formato sinfónico; concierto en el que prevaleció escénicamente la formalidad, no así el ánimo de las y los jóvenes talentos, acompañados por los excelentes arreglos orquestales. El reto para éstos fue “no cantar la música vernácula, bravía, como si fuese ópera”, según las propias palabras de la reconocida soprano María Katzarava.

El recuerdo de José Alfredo estuvo presente durante todo el concierto, sin embargo, el público en contadas ocasiones se animó a cantar algunas letras. Los intérpretes tuvieron que animar al público, pasado dos terceras partes del recital: “Están muy calladitos”, dijo uno de los cantantes.

Fue así como llegó por primera vez, el espíritu del compositor guanajuatense a Bellas Artes, quien en vida no tuvo la oportunidad de interpretar ahí sus canciones, las cuales de una u otra forma, siempre hacen estremecer lo más profundo de los corazones.

Siempre me pregunto yo: ¿cuánto me debía el destino que contigo me pagó?, se escuchó también la letra de José Alfredo, quien como nadie le cantó al amor y al desamor, a la rabia y al desengaño, incluyendo el odio, también a la nostalgia y la ternura para olvidar una ilusión o soportar una tristeza, y que igual lo hizo al imposible amor de su tiempo, entre dos personas de distinta clase social, si nos dejan / nos vamos a vivir a un mundo nuevo, letras que marcaron la educación sentimental de toda una época.

Además, José Alfredo compuso letras dedicadas a distintos estados del país, como Chihuahua, Veracruz, Mazatlán y San Luis Potosí, las cuales fueron cantadas durante el homenaje, el cual concluyó con una de las más memorables de sus letras: El rey.

Los arreglos orquestales fueron comisionados a un equipo de seis artistas de distintas entidades del país, que de acuerdo con las autoridades culturales, han demostrado gran capacidad y sensibilidad en este tipo de proyectos: Érick Tapia, Nubia Jaime Don Juan, Luis Eduardo Trillo, Leonel Aldino, Gustavo Larrea y Carlos Gómez Matus.

Hoy a las 12:30 horas se efectuará el segundo concierto en el teatro principal del Palacio de Bellas Artes, con el que se rinde un homenaje nacional a José Alfredo Jiménez, autor de más de 300 canciones, por lo que es reconocido en distintas latitudes, como uno de los más emblemáticos compositores y cantantes de música ranchera del país.

La interpretación del programa se replicará con otras orquestas de distintos estados, la del Conservatorio de Celaya ofrecerá un concierto los días 12 y 13 de septiembre en Celaya y Dolores Hidalgo, Guanajuato.

Las orquestas filarmónicas de Querétaro el 13 de septiembre; en Veracruz, la de Boca del Río el 22 de septiembre, y la de la Universidad Autónoma de Chihuahua en noviembre, mientras que la del Estado de Puebla tiene contemplado el concierto en diciembre.

En total serán 15 orquestas estatales en el país, incluyendo la Orquesta Sinfónica de la Victoria de Honduras y agrupaciones del Conservatorio Nacional de México, las escuelas superiores de Música y la de Música y Danza de Monterrey.