Ciudad de México. Los dólares que reciben las familias por medio de las remesas hoy en día compran 16 por ciento menos que el año pasado cuando son convertidos a pesos mexicanos, debido a la apreciación de la divisa nacional contra la estadounidense y a los estragos que dejó el aumento de la inflación a finales de 2022, indicó BBVA México.
Esta mañana, el Banco de México (BdeM) dio a conocer que el flujo de remesas que llegaron al país entre enero y julio acumuló 35 mil 895 millones de dólares, monto 9.4 por ciento superior si se compara con los 32 mil 817 millones de dólares reportados en el mismo lapso del año previo, una cifra sin precedentes para un periodo similar desde 1995.
De acuerdo con un análisis realizado por BBVA, las remesas mantienen una racha de 39 meses consecutivos al alza, iniciada desde el mes de mayo de 2020, y de forma anualizada acumulan en los últimos 12 meses un flujo de 61 mil 588 millones de dólares, el mayor volumen en su historia, con una tasa de crecimiento de 9.6 por ciento.
Sin embargo, señaló, la apreciación del peso frente al dólar y la inflación han mermado el poder adquisitivo de los hogares receptores de estos recursos.
Según BBVA, entre julio de 2022 y julio de 2023 el peso presentó una apreciación de 17.4 por ciento, al pasar de 20.53 a 16.94 unidades por billete verde en promedio.
A su vez, la inflación en México medida por el Índice Nacional de Precios al Consumidor fue de 4.8 por ciento en este mismo periodo.
En este sentido, BBVA señaló que en julio de 2022, el poder adquisitivo del flujo de remesas al país alcanzó su mayor nivel, con un equivalente a 114 mil millones de pesos constantes a precios de julio de 2023, y para este último mes (julio de 2023) las remesas al país sumaron 95 mil 800 millones de pesos.
“De esta forma, en términos de pesos reales, las remesas a México han perdido en un año 16 por ciento de su poder adquisitivo”, explicó la institución financiera.