Washington. La Casa Blanca informó ayer que cuenta con nueva información de espionaje que muestra que el presidente ruso, Vladimir Putin, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, han intercambiado cartas, en momentos en que Rusia recurre a Corea del Norte para conseguir municiones para la guerra en Ucrania.
La revelación surge semanas después de que Washington afirmó que el ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu, en reciente visita a Pyongyang, pidió a funcionarios norcoreanos aumentar la venta de municiones para su guerra con Ucrania.
El gobierno del presidente Joe Biden ha reiterado que el Kremlin depende tanto de Corea del Norte como de Irán para abastecer sus arsenales; ambas naciones están muy aisladas del escenario internacional debido a sus programas nucleares y su historial en materia de derechos humanos.
En marzo, la Casa Blanca indicó que, de acuerdo con agencias de inteligencia, Rusia enviaría alimentos y materias primas a Corea del Norte a cambio de municiones.
En tanto, el gobierno de Biden aprobó la primera transferencia militar de Estados Unidos a Taiwán bajo un programa de ayuda generalmente reservado a las naciones independientes y soberanas.
El Departamento de Estado notificó al Congreso ayer que el material será “utilizado para fortalecer la capacidad de autodefensa de Taiwán. El paquete es modesto, apenas 80 millones de dólares, pero probablemente enfurecerá a China, que considera a Taiwán parte de su territorio.