Madrid. El astromóvil Pragyan de la misión lunar india Chandrayaan-3 realizó las primeras mediciones in situ de la composición elemental de la superficie lunar cerca del polo sur.
Estas mediciones sobre el terreno –obtenidas con instrumento de espectroscopía de descomposición inducida por láser (LIBS)– confirman sin ambigüedades la presencia de azufre en la región, algo que no era factible con los instrumentos a bordo de los orbitadores, informó la agencia espacial en un comunicado.
Según un estudio previo, el azufre en las rocas volcánicas lunares es una huella dactilar de la presencia de sulfuro de hierro en el interior rocoso de la luna, que es donde se cree que quedaron los metales preciosos cuando se crearon las lavas en el satélite natural terrestre.
LIBS es una técnica que analiza la composición de materiales exponiéndolos a intensos pulsos de láser.
Un pulso láser de alta energía se enfoca sobre la superficie de un material, como una roca o un suelo; genera un plasma extremadamente caliente y localizado. La luz de plasma recolectada se resuelve espectralmente y se encuentra mediante detectores como los dispositivos de carga acoplada.
Dado que cada elemento emite un conjunto característico de longitudes de onda de luz cuando está en estado de plasma, se determina la composición elemental del material.
Los análisis preliminares, representados gráficamente, revelan la presencia de aluminio, azufre, calcio, hierro, cromo y titanio en la superficie lunar. Otras mediciones manifiestan la presencia de manganeso, silicio y oxígeno. Se realiza una investigación exhaustiva sobre la presencia de hidrógeno.
La carga útil de LIBS se desarrolla en el Laboratorio de Sistemas Electroópticos Bengaluru.