Guadalajara, Jal. La inseguridad, desigualdad e injusticia tan extendidas en América Latina, son un retroceso para la democracia porque han dado pie a que avancen proyectos políticos conservadores y que crezca “un sector que mira a un esquema autoritario de ultraderecha como la solución de los desafíos que existen, y eso me preocupa”, dijo la ex presidenta chilena Michelle Bachelet.

En el discurso que ofreció este martes en el auditorio Salvador Allende de la Universidad de Guadalajara (UdeG), dijo que lo ocurrido recientemente en Argentina con el candidato ultraconservador Javier Milei durante las elecciones primarias, o la posibilidad de que el pinochetista Partido Republicano gane las próximas elecciones de Chile, son una llamada de alarma para la democracia.

“Hay un movimiento de retroceso muy importante, y quiero entender por qué está pasando eso en varios países de la región. Quiero creer que es circunstancial, que tiene que ver con esa tremenda preocupación de la gente por la inseguridad, más que por una convicción de que ese ideario ultraconservador sea el que represente a las personas”, dijo ante cientos de estudiantes que llenaron el auditorio ubicado en el campus La Normal de la UdeG.

Afirmó que el golpe de Estado en Chile –que dejó más de tres mil víctimas, entre ellas a miles de personas desaparecidas aún no localizadas, además de una dictadura militar que duró 17 años—, significó la derrota de la política y un fracaso de la democracia.

“El año 1973 significó el fracaso de la política, la política fue derrotada, algo que no puede volver a suceder ni en Chile ni en ninguna otra parte. La desconfianza fue tal que resultó imposible llegar a acuerdos, algo que debemos aprender hoy”, afirmó.

Instó a los jóvenes presentes, a los de México, de Chile y de América Latina, a que asuman su responsabilidad histórica para reconocer una realidad injusta, y de esa manera entiendan “que a veces hay un status quo que no le da dignidad a todas las personas”.

“Son los jóvenes de hoy quienes liderarán los cambios del mañana, por eso es tan importante que ustedes también comprendan y sientan, desde ya, esa gran responsabilidad que tienen”, enfatizó, recordando que ella en su juventud como alumna de medicina, participaba en las manifestaciones que apoyaban al derrocado presidente Allende, con la convicción de que podía cambiar la realidad que prevalecía en Chile.

Entonces, la también ex alta comisionada para Derechos Humanos de la ONU se refirió a la frase célebre que Allende pronunció en su visita a la UdeG en 1972: “Ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica”, y agregó que para Allende la juventud implicaba una vocación de cambiar las cosas y transformar una realidad.

“Se debe asumir a la universidad como un lugar de encuentro prioritario con el conocimiento y convertirlo en un punto de partida que permita transformar la sociedad en su conjunto, y así ser un vínculo con la realidad social ineludible. Se necesitan profesionales que no busquen engordar los puestos públicos de las capitales de nuestras patrias, sino que vayan a las provincias y se hundan en ellas”, apuntó.

En su visita de dos días a Guadalajara, Bachelet inauguró el lunes la segunda edición de la Cumbre Internacional del Hábitat en América Latina y el Caribe, abierta del 28 al 30 de agosto, recibió un doctorado honoris causa de la UdeG y un reconocimiento de la industria del tequila.

El 2 de diciembre del año pasado Bachelet también participó, de forma virtual, en una conferencia en el mismo auditorio Salvador Allende de la capital jalisciense, con motivo de la fecha exacta en que se cumplieron 50 años del discurso de Allende en Guadalajara en ese mismo lugar.

“Hoy lo que va en contra de las leyes naturales es ser joven, disfrutar las libertades y las conquistas de siglos de lucha sin asumir la responsabilidad de defender la democracia que lo sostiene”, dijo entonces la ex presidenta.