Con el corazón galopando y una suma de múltiples esfuerzos, Pumas hizo todo para merecer el triunfo por 2-1 ante Tigres en el estadio Olímpico México 68.
Un equipo formado por más obreros que capataces, en el que la inversión de sudor se repartió de manera equitativa, logró cambiar la imagen que había dejado en Ciudad Universitaria en duelos anteriores.
Gracias al gol del argentino Gabriel Matías Fernández (50), los universitarios volvieron a ser todo aquello que busca el técnico Antonio Mohamed: garra, sacrificio y solidaridad. Tres empates y una derrota acumularon los auriazules en sus pasados compromisos, pero El turco los obligó a mirar hacia adelante sin importar que enfrente estaba uno de los mejores planteles de la Liga.
Además del acierto de El Toro, que cambió los silbidos del inicio por un reconocimiento general, el argentino Juan Ignacio Dinenno convirtió una falta de Javier Aquino sobre César Huerta en el segundo tanto de la noche desde el manchón penal (84). Sólo así, después de atravesar momentos de crisis, los de la UNAM lograron ponerse de pie en el torneo, alcanzando el cuarto sitio con nueve puntos.
Los felinos, en cambio, pagaron caro su planteamiento conservador y pese al 2-1 de Jonathan Herrera (90+3) sumaron su primera derrota.
En tanto, en Aguascalientes, el Necaxa ligó su cuarta derrota consecutiva bajo el mando del venezolano Rafael Dudamel, en un partido ante el Querétaro (1-0) que fue resuelto por el gol de Ángel Sepúlveda.
Los Gallos, uno de los equipos mexicanos que más lejos llegaron en la pasada Leagues Cup en Estados Unidos, prolongaron su estado de gracia en la liga al dejar los últimos lugares y acercarse al pelotón con más puntos acumulados.
En una acción que tuvo de por medio un despeje del uruguayo Emanuel Gularte, Sepúlveda entró por la banda izquierda, a espaldas del defensor Emilio Martínez y conectó de volea para mandar al poste más lejano del arquero Ezequiel Unsain. El mexicano no pudo ocultar su asombro al ver la dirección que tomó su remate.
Disminuidos en su nivel de confianza, los Rayos modificaron hasta cinco veces a sus hombres en cancha, pero no encontraron cómo hacer daño en el arco queretano.
Con siete de 12 puntos posibles, los Gallos llegaron ya al noveno lugar de la competencia.