Como parte de las acciones para consolidar el Servicio Nacional de Salud Pública (SNSP), después de que no se transformó la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, ayer se presentaron sus componentes: los distritos de salud para el bienestar (antes jurisdicciones sanitarias), centros coordinadores de salud, que se encargarán de desarrollar los programas prioritarios, y las redes integradas de servicios.
Mediante las redes y centros, la Secretaría de Salud (Ssa), como órgano rector, podrá asegurar la capacidad resolutiva del primer y segundo nivel de atención; es decir, de los centros de salud y hospitales generales, así como la integración sectorial con un sistema de referencia y contrarreferencia. Ayer se publicó en el Diario Oficial de la Federación el acuerdo por el que se emiten las disposiciones generales del SNSP, cuya misión es garantizar el derecho a la protección de la salud en su dimensión colectiva o social. Para ello, coordinará las acciones en la materia con dependencias y entidades de la República. Esto es, la evaluación y vigilancia del estado médico de la población, la promoción de una vida sana, el fomento de la participación comunitaria y de la sociedad civil organizada; la identificación, prevención, atención y recuperación de enfermedades, así como la atención de determinantes o causas estructurales de cierta condición médica. También le corresponde participar en la atención de urgencias epidemiológicas.
Para la realización de sus funciones, el SNSP contará con los distritos de salud para el bienestar y los centros coordinadores, así como los servicios esenciales en salud colectiva, que se organizan en los sistemas: laboratorios de salud pública, emergencias, sangre segunda, inteligencia en salud, regulación y fomento sanitario, así como la promoción de la salud.