Dos semanas como quiera pasan rápido, consideraron algunos usuarios de la línea 1 del Cablebús, luego de que fue suspendido el servicio ese tiempo para realizar trabajos de mantenimiento.
Dichas labores, necesarias para la continuidad con eficiencia de este servicio, al que ya se acostumbraron por su comodidad, seguridad y rapidez, les trajo molestias como levantarse más temprano, hacer largas filas y soportar aglomeraciones y apretones en autobuses o microbuses, pero al final, pasadas las dos semanas, muchos agradecieron tener el servicio de regreso y estar conscientes de que las labores de mantenimiento serán anuales.
Claudio Efraín, quien utiliza el Cablebús de Barrio Alto a Indios Verdes, comentó que “antes tomábamos el camión y tardábamos para llegar a Indios Verdes porque va haciendo paradas constantemente, pero en el Cablebús hacemos medio hora, es más seguro, rápido y económico.
“Estuvo cerrado 15 días, pero está bien el mantenimiento; si no lo hicieran puede haber fallas y ya no daría servicio. Estuvo bien que lo hicieran en vacaciones; ahorita podemos llegar más rápido a nuestros trabajos y más seguros porque la inseguridad está fuerte.
“Los transportes alternativos de la RTP salían desde la estación del Cablebús, pero, la verdad, hay mucha población en Cuautepec y se aglomeran mucho. Se demoraban en salir hasta 20 minutos”.
Iraís Trejo señaló que el transporte de apoyo está bien, pero hay demasiada gente, aunque no vi ambulantes. Tardaban en salir de la terminal hasta que se llenaban; hacen paradas continuas o van demasiado rápido o lento, aunque no haya tráfico. Es engorroso, y pues aguantar 15 días es necesario para nuestro bienestar.
Rosa Elena dijo: “Para mí fue complicado, ya que RTP tenía buen servicio, pero me dejaba retirado de la escuela, tenía que caminar cinco calles y con el Cablebús está mejor; lo tomo de Indios Verdes a Cuautepec, voy a la UACM. Sólo pediría que empataran el mantenimiento con las vacaciones porque es de suma importancia para nuestra seguridad y fundamental después de todo lo que ha pasado”.
Elizabeth Esquivel apuntó que “estas dos semanas que no hubo servicio teníamos que subirnos al camioncito muy lento, pero el mantenimiento es necesario; se extraña mucho el Cablebús; ya nos acostumbramos a llegar rápido y seguros, y a no ir apretados en el camión”.
Para Sonia Esquivel “fue muy bueno el servicio de RTP que asignaron gratuitamente para los que usamos el Cablebús y sólo hacían tres paradas”.