Beverly Hills. El mexicano Saúl Canelo Álvarez sabe que en sus últimas contiendas no ha cumplido con las expectativas de los aficionados, quienes incluso hablan de una debacle en la carrera del boxeador. Ahora, en la batalla contra el estadu-nidense Jermell Charlo, en la que expondrá los títulos supermediano, ve una oportunidad para demostrar que mantiene el ni-vel de un peleador de élite.
“Entiendo lo que dice la gente, y estoy de acuerdo. No me veía lo mejor posible en las últimas dos peleas. Pero sé por qué, y estoy listo para este duelo. Veremos lo que pasa. Verán algo diferente”, dijo el mexicano en el segundo cara a cara de ambos rumbo a su pe-lea del 30 de septiembre.
Sin embargo, desde la elección del rival, el tricolor desató controversia. Jermell Charlo se yergue al menos siete centímetros por encima de Canelo Álvarez cuando se encaran. Y cuando posan lado a lado para las fotos, con sus cinturones de campeones, resulta evidente que Charlo tiene brazos más largos y consecuencia mayor alcance.
Quien no sepa asumiría sin duda que el Canelo es el peleador que subirá dos categorías de peso el próximo mes para enfrentarse a un hombre más grande, tanto en estatura como en logros.
Pero quien está corriendo el riesgo es Jermell, el campeón indiscutible en peso superwélter (69 kilogramos) y autodenominado “hermano pequeño” de su mellizo, el campeón en la categoría media-na (72 kilogramos) Jermall Charlo.
Álvarez sorprendió al mundo del boxeo cuando escogió al pequeño Charlo como su próximo retador para sus campeonatos mundiales en las 168 libras (76 kilogramos), pero Jermell dejó claro que está listo para aprovechar esta oportunidad con la mejor actuación de su vida.
“No solamente soy el pequeño Charlo”, afirmó el estadunidense con una sonrisa. “Soy un gran Charlo. Canelo verá que tengo buena pegada, buenos movimientos. Soy un general en el ring, al igual que él. También verá algo diferente de mí. Voy a estar preparado. Siempre he sido el trenecito que sigue adelante”.