Brandon. Seis ex policías de Misisipi se declararon culpables de cargos estatales ayer por torturar a dos hombres negros. Todos admitieron en días recientes su culpabilidad en un caso federal relacionado sobre derechos civiles. Los fiscales afirman que algunos de los oficiales se apodaban el “Escuadrón matón”, debido a su disposición a usar la fuerza excesiva y encubrirla, incluyendo el incidente en que un agente disparó a una víctima en la boca.
En enero, los policías entraron en una casa sin orden judicial, esposaron y agredieron a los dos hombres con pistolas paralizantes, un juguete sexual y otros objetos.
Los agentes se burlaron de ellos con insultos raciales durante una sesión de tortura de 90 minutos, luego idearon un encubrimiento que incluía plantar drogas y un arma, lo que condujo a cargos falsos que podrían haber enviado a una víctima a prisión por años.
Su conspiración se reveló meses después, cuando uno de ellos dijo al jefe policial que había mentido, lo que devino confesiones de los demás.
Todos los acusados accedieron a las sentencias recomendadas por los fiscales estatales que van de cinco a 30 años de prisión, aunque el juez no está obligado a emitir esa sentencia. La pena por los cargos estatales se cumplirá al mismo tiempo que las condenas federales que recibirán. A cada uno le podrían dictar condenas de prisión más largas en un tribunal federal en noviembre.
Los cinco ex policías del condado Rankin son Brett McAlpin, Hunter Elward, Christian Dedmon, Jeffrey Middleton y Daniel Opdyke, y un agente de policía de la ciudad de Richland, Joshua Hartfield.
Los seis se declararon culpables de los cargos estatales de obstrucción de la justicia y conspiración para obstaculizar el enjuiciamiento.
Las víctimas, Michael Corey Jenkins y Eddie Terrell Parker, llegaron juntos a la corte. Se sentaron en la primera fila, a pies de distancia de las familias de sus atacantes. Monica Lee, la madre de Damien Cameron, otro hombre negro que murió en 2021 a raíz de que Elward lo golpeó y lo electrocutó durante un arresto, abrazó a ambos hombres.
Luego que salieron a la luz los actos de violencia policial en el condado Rankin, algunos residentes señalaron una cultura policial que, según dijeron, les dio a los agentes carta blanca para abusar de su poder.