Madrid. El Partido Popular (PP) y Vox sellaron ayer un pacto de gobierno para la futura administración autonómica de Aragón con un programa político de hasta 80 puntos en común y en el que la agrupación de extrema derecha tendrá una vicepresidencia y dos consejerías.
Con este acuerdo, ambos partidos ya gobiernan en coalición en cuatro comunidades autónomas: Castilla y León, Extremadura y Valencia. Así, ya funcionan como un bloque, con la formación de cada vez más gobiernos autonómicos y municipales.
A la espera de que se sumen otras regiones, como Murcia y Ceuta, el futuro presidente de Aragón, el popular Jorge Azcón, dio el visto bueno a un programa de gobierno en el que se incluyen algunas de las exigencias ideológicas de la formación de extrema derecha, como la derogación de la Ley de Memoria Democrática, en el que se busca restituir los derechos arrebatados a la víctimas de la guerra civil y la dictadura, además de la eliminación de la nueva ley trans, en la que se reconoce el “derecho a la autodeterminación de género”.
El pacto incluye hasta 80 puntos programáticos, que, se supone, serán la hoja de ruta de su gestión para los próximos cuatros años y que están agrupados en 10 áreas: sanidad, educación, bienestar social y familia; política fiscal, empleo, industria y comercio; simplificación administrativa, agricultura, medio ambiente y territorio; infraestructuras y medio ambiente; vivienda y lucha contra la ocupación ilegal y la inseguridad, y promoción de la riqueza y la diversidad del territorio y defensa del patrimonio histórico y cultural.
Los responsables de la firma del acuerdo fueron los voceros en las Cortes de Aragón de ambos partidos, Ana Alós y Alejandro Nolasco.
Azcón, quien sustituirá en el cargo al socialista Javier Lambán, entregará hasta dos consejerías y una vicepresidencia a Vox: la de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia, que tiene rango de vicepresidencia primera, y la de Agricultura y Ganadería.