El debate de los nuevos libros de texto gratuitos llegó al Senado, donde la oposición pidió la comparecencia de la secretaria de Educación, Leticia Ramírez, para que explique los cambios realizados, y acusó que los ejemplares muestran un sesgo ideológico. Académicos que acompañaron a estos legisladores plantearon que hay errores en los contenidos.
Por su lado, Morena se dijo abierto a una reunión de trabajo con la funcionaria, pero si lo que se trata es de sentar a la secretaria en el banquillo de los acusados para que la ultraderecha se ponga a dar de gritos, “no lo vamos a permitir”, precisó la senadora Martha Lucía Micher.
En el marco de la Comisión Permanente, diputados de PRI, PAN y PRD, así como los académicos, pidieron que no se distribuyan los nuevos libros y se retomen los del ciclo escolar anterior. Acusaron que los propuestos se elaboraron en absoluta clandestinidad, hermetismo y opacidad, además de que no se consultó a los maestros.
Las priístas Carolina Viggiano y Ana Lilia Herrera; el panista Jorge Triana, y la perredista Gabriela Sodi apuntaron que los nuevos textos pretenden imponer una ideología y una verdad cuando lo que se tendría que hacer es generar una conciencia crítica entre niños y jóvenes.
Graves errores
José Franco, ex presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, calificó de un grandísimo error haber quitado los libros de ciencias naturales, matemáticas y lecto-escritura, pues con ello se inhibe el desarrollo del pensamiento crítico de los niños.
Entre los errores detectados, expuso por ejemplo que en el de quinto año vienen “unas cápsulas de física y en una de ellas se habla de las propiedades físicas de los objetos…y ponen como propiedad física el peso… pero el peso de los objetos no es una propiedad física, el peso de los objetos depende del campo gravitacional donde está metido un cuerpo. El peso no puede ser una propiedad física, la propiedad física es la masa”.
Por su lado, Max Aldana, del Instituto de Física de la UNAM, resaltó que los ejemplares están llenos de pifias muy fáciles de identificar.
Por Morena, Micher explicó que es respetable lo que opinen otras instancias sobre los libros, pero eso no es para echarlos atrás o almacenarlos. “Embodegarlos es demasiado. Si algunos temas no les gustan, que no hablen de ellos”, agregó.
Rechazó que sean “ideologizantes. Era más ideologizante que siempre se hablara de los que ganaban y nunca de los que perdían las batallas”.