Vecinos de la plaza Agustín Jáuregui, ubicada en la colonia Insurgentes Mixcoac, rechazan las obras de remodelación que realiza la alcaldía Benito Juárez al asegurar que viola el decreto oficial publicado en junio de 2000, pues se abre el espacio “a la circulación vehicular y se colocan parquímetros, a pesar de ser un área protegida por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)”.
Los residentes colocaron lonas en las ventanas del edificio conocido como Los Arcos, que se localiza en la esquina de Augusto Rodin y Goya, así como de algunas de viviendas que rodean la plaza, en las que se lee: “Alcaldía Benito Juárez. Santiago Taboada, exigimos cumplimiento de acuerdos. No violación al decreto plaza Jáuregui”, y “Exigimos cumplimiento de decreto. Plaza Jáuregui. No parquímetros”.
En el mitin, los colonos recordaron que en junio pasado acudieron a las oficinas de la demarcación para solicitar audiencia con Taboada, pero no fueron recibidos; Mercedes Mata, una de las afectadas, señaló que lo única petición “es que se respete cabalmente el decreto vigente publicado el 21 de junio de 2000, el cual indica que el tránsito en la plaza es sólo peatonal.
“Abrirla y meter parquímetros es violar el decreto, pues la convierte en estacionamiento público. Santiago Taboada: estamos aquí en la plaza esperándote, pedimos tu presencia para que nos atiendas a todos los vecinos de la plaza y nos des una solución puntual.”
También solicitaron la presencia del jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, ya que “esto ya no es un tema de interés local, es un tema de toda la ciudad, el patrimonio es de todos”.
Los vecinos se quejaron de que se amplió la guarnición, el nuevo adoquín no está nivelado y se colocaron jardineras en el área común, por lo que dijeron que seguramente se beneficiará a los encargados de restaurantes y cafeterías que sacarán sus mesas.
Lamentaron que se colocara el adoquín con colores y no de un solo tono, además de que el anterior no requería ser sustituido.
Residente desde hace más de 51 años, Yolanda Huitrón expuso que su esposo tiene 96 años, por lo que no es viable que se coloquen parquímetros frente a su domicilio, con lo que a su vez se le impedirá dejar allí su auto, además de que las obras empezaron sin que 50 familias fueran consultadas.
Por su parte, Ángeles Banderas Tarabay comentó que son varias las generaciones que han habitado en su vivienda desde 1800, por lo que se manifestó en contra de los parquímetros, y sostuvo que es necesario que se le permita estacionar su vehículo frente a su casa.
Rosa María Goyzueta y Alejandra Gómez, quienes viven alrededor de la plaza desde hace más de 50 años, coincidieron en que el acceso debe ser peatonal y no convertirse en área de estacionamiento.
Otro grupo de residentes señalaron que antes de que empezaran los trabajos de remodelación la plaza se convirtió en un estacionamiento público, por lo que indicaron que es viable la colocación de hasta 15 parquímetros en zonas estratégicas para ordenar el tránsito y movilidad vehicular en la plaza del siglo XVI cuya característica es peatonal.