Residentes de la zona especial de desarrollo controlado (Zedec) Santa Fe, en Cuajimalpa, advirtieron de irregularidades en un cambio de uso de suelo que permitirá construir un edificio de 20 pisos para 144 departamentos en una zona escolar contigua al parque La Mexicana.
El proyecto denominado Central Park Santa Fe incluye la construcción de un colegio de cinco niveles, cuya obra tiene ya un avance de 80 por ciento.
En la primera reunión para el proceso de consulta vecinal de dicho inmueble, los habitantes de la zona pidieron que la inmobiliaria explique cómo obtuvo la licencia de uso de suelo de tipo habitacional H20/70A, que en el plano que exhibió la presidenta de la asociación de colonos Zedec Santa Fe, Itziar de Luisa Plazas, está como área de equipamiento E5/70.
El predio mide 18 mil 229 metros cuadrados y el área de desplante de la torre de departamentos es de mil 56 metros cuadrados, lo mismo que el de la escuela; en el primer caso, se planean cinco pisos más bajo el nivel de banqueta, de los que cuatro que se destinarán a un estacionamiento con 208 cajones.
Los vecinos refirieron que en torno al desarrollo sólo hay escuelas: la Universidad Westhill, el colegio Eton School, el Eugenio de Mazenod, el Monteverde, el Anglo Americano Santa Fe y el Pinecrest International School, lo que genera dudas sobre la fiabilidad del uso de suelo para el complejo.
De Luisa alertó que en esa misma zona hay otro terreno, por lo que al permitir la construcción de la torre de departamentos “nos compramos un segundo problema, que nos vayan a sorprender con que también allí se va a hacer vivienda”.
Advirtieron además que el proyecto plantea un circuito de acceso sobre 2 mil 400 metros cuadrados del terreno para la escuela y la torre, con una glorieta que pareciera que estaría preparando la superficie del predio que quedaría libre en caso de una futura ampliación, con más torres de departamentos.
Los vecinos advirtieron también irregularidades en la edificación de la escuela, que ya tiene un avance de 80 por ciento, al haberse acogido al acuerdo de facilidades administrativas que emitió el gobierno de la ciudad en agosto de 2021 como medida de reactivación económica dirigida a proyectos que ya habían empezado sus trámites.
Esto, porque la construcción se inició mucho antes de esa fecha, lo que significaría que comenzaron la obra sin los permisos correspondientes y el adherirse al acuerdo de facilidades les permitió cubrir esas irregularidades.