La sequía, el aumento de los precios del petróleo y el fin del acuerdo Rusia-Ucrania en el comercio de granos, llevaron a las materias primas agrícolas a cerrar la sesión de este lunes con ganancias.
Los precios del maíz, el trigo y la soya aumentaron 6.15, 8.6 y 1.55 por ciento, respectivamente, cotizando en 5.69, 7.57 y 14.23 dólares por bushel. Lo anterior reaviva las llamas de la inflación en el mundo.
El precio del trigo en el mercado de Chicago volvió a dar un salto este lunes. El fenómeno responde a la incertidumbre que genera en el mercado la tensión entre Rusia y Ucrania, dos de los principales productores mundiales.
Hace una semana, Rusia rechazó prorrogar el acuerdo de exportación de grano desde el Mar Negro que mantenía con Ucrania, lo que ha desatado los temores de una nueva escalada en los precios globales de los alimentos. La decisión del Kremlin afecta una de las principales rutas de exportaciones agrícolas ucranias, especialmente de trigo y aceite vegetal, principalmente en época de cosecha.
Los mercados reaccionaron con pesimismo, con una subida en los futuros de trigo que cotizan en el mercado de Chicago, y acumulan un alza de 10 por ciento en dicho periodo.
Las presiones al alza para los precios de materias primas agrícolas se debieron a que las condiciones más secas de lo habitual en Europa y Estados Unidos están afectando el rendimiento de los cultivos. Además, los drones rusos atacaron la ciudad portuaria de Reni en Ucrania, ubicada en el río Danubio, frente a Rumania, país miembro de la OTAN, lo que elevó la aversión al riesgo en la región.
El ataque destruyó un hangar de granos, lo que hace evidente que el gobierno ruso busca paralizar la capacidad de exportación de Ucrania.