Pyongyang. Un submarino de propulsión nuclear con bandera estadunidense llegó a la base naval de la isla de Jeju, en Corea del Sur, días después de que una primera embarcación de este tipo llegó a puerto por primera vez en cuatro décadas, en medio de las tensiones con las autoridades norcoreanas.
La marina sudcoreana informó que el submarino USS Annapolis ha ingresado a su base naval, ubicada en el sur del país, con el fin de reabastecerse: “Su entrada al puerto es para reponer suministros militares mientras se encuentra en una misión de operaciones”, según un comunicado recogido por la agencia de noticias Yonhap.
El servicio de prensa de la armada destacó que la misión de esta embarcación es realizar operaciones de guerra antibuque y antisubmarina en el marco de ejercicios militares conjuntos para "fortalecer una postura de defensa combinada" por el 70 aniversario en las relaciones bilaterales entre Washington y Corea del Sur.
En junio llegó a Busán, a 320 kilómetros de Seúl, el submarino USS Kentucky, en lo que se consideró un movimiento para tranquilizar al público surcoreano de las amenazas nucleares de Pyongyang. No obstante, semanas después el gobierno de Corea del Norte criticó la decisión de la Administración Biden de desplegar submarinos nucleares estadunidenses en la península, considerando que aumentará las tensiones en la región, que se encuentra en una situación "muy peligrosa".
"El despliegue del submarino nuclear estratégico estadunidense portador de ojivas nucleares en la península coreana significa que dichas armas estadounidenses volverán a la zona por primera vez desde 1981. Se trata de una situación muy peligrosa, ya que llevará la tensión militar regional a un estado más crítico y puede incitar la peor crisis de conflicto nuclear en la práctica", explicó entonces un portavoz del Ministerio de Defensa Nacional norcoreano.