El gasto programable pagado de enero a mayo –que sustenta la operación del gobierno para proporcionar servicios a la población– registró un retroceso de 1.6 por ciento real respecto del mismo periodo de 2022, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el reporte mensual a la Cámara de Diputados.
El documento resalta que el gasto ascendió a un billón 744 mil 159 millones de pesos para las dependencias del gobierno federal, las dos cámaras del Congreso, el Poder Judicial y el Instituto Nacional Electoral.
Conforme al detalle de lo cubierto en los primeros cinco meses del año, la dependencia que registró más incremento es la propia Secretaría de Hacienda, con 477.6 por ciento, porque mientras en el mismo periodo de 2002 recibió recursos que ascendieron a 9 mil 7.5 millones de pesos, para este año sumaron 55 mil 607.4 millones.
Las desafortunadas
El crecimiento es tal, que mientras en el mes de mayo del año anterior manejó mil 932 millones de pesos, en mayo pasado sumó 47 mil 105.2 millones.
Por otro lado, entre las dependencias que menos recursos recibieron respecto de enero a mayo de 2022, están la Secretaría de Energía, a la que se entregaron 25 mil 838.5 millones de pesos, esto es 73.7 por ciento menos; Turismo, 27 mil 238.9 millones, 42.1 por ciento menos; la Secretaría del Trabajo, 8 mil 588.9 millones, 36.7 por ciento menos.
A Salud se pagaron 43 mil 411.8 millones de pesos, es decir, 16 por ciento menos; a la Comisión Nacional de Hidrocarburos, 3 mil 313.9 millones, una reducción de 14.3 por ciento, y a la Defensa Nacional 37 mil 853.1 millones, 5.5 por ciento menos.
A las empresas productivas del Estado se pagaron 389 mil 978.6 millones de pesos.
En el caso de Petróleos Mexicanos recibió 238 mil 171.2 millones, es decir 0.2 por ciento real más, mientras la Comisión Federal de Electricidad 151 mil 807.4 millones, 29.2 por ciento menos.
Los subsidios, transferencias y aportaciones al Issste ascendieron a 529 mil 522.5 millones, esto es, 6.5 por ciento real adicional.