En América Latina, según cifras oficiales, hay mas de un millón 600 mil organizaciones civiles que, sin ánimo de lucro, trabajan y desplazan a millones de personas en proyectos culturales, reforestación, limpieza de ríos, equidad de género, talleres de alfabetización, sustentabilidad, etcétera, con la convicción de poder transformar su realidad.
Arte Obrera, ubicado en la calle Isabel La Católica 233, es una red comunitaria, un espacio de cultura que se genera a través del diálogo entre los habitantes de esa zona. Proyecto independiente que tiene como eje transversal el desarrollo de la creatividad en artes visuales, teatro, danza, música y literatura. Su misión es la educación artística de niños y jóvenes interesados en conocer y practicar las artes.
Conocida por los habitantes de la colonia obrera como ARO, Arte Obrera surge a partir de una herencia de solidaridad, de empatía, de vocación, de humanismo de la familia Sarabia y como respuesta a una clase trabajadora preocupada por generar más oportunidades para sus hijos. Es un lugar de compromiso con el arte como herramienta de transformación social y de su entorno inmediato.
El edificio de tres pisos con 36 salones de diferentes tamaños, adaptados acústicamente, fue diseñado por el arquitecto Enrique Sarabia, hijo de Josefa Lago Tigel, y por el capitán Sarabia, familia arraigada en la colonia Obrera a mediados del siglo pasado, que donó en comodato el inmueble a la comunidad de la colonia mencionada, donde habitan más de 30 mil personas.
Fernanda Parra es la directora académica y cofundadora con el director de Arte Obrera, el promotor cultural Eduardo Barajas (1964, Ciudad de México), creador de La Última Carcajada de la Cumbancha (LUC, 1987-1992), donde detonaron bandas de rock como Maldita Vecindad y Café Tacuba, entre otras. El personal está conformado por vecinos de la zona, pero también por artistas con vocación y valores sociales, quienes ofrecen talleres de danza aérea, teatro, artes visuales y música.
La empresa Hermes Music México, a través de Juan Perches, realizó una donación de numerosos instrumentos musicales con los que se han formado varios ensambles de niños y jóvenes, así como de mamás y papás de los alumnos. Donó violines, baterías, guitarras eléctricas y acústicas, bajos, saxofones, flautas transversales y contrabajos.
Más importante que el resultado –dice Barajas– es el proceso creativo donde surge la magia, la retroalimentación, el compromiso, cuando la danza, el teatro y la pintura se expresan por sí mismos.
Entre la población de la colonia Obrera se articuló un bazar mensual en el que cohabitan diferentes productos, playeras, exposiciones de gorras, comida y alimentos orgánicos que generan una economía local sustentable. El apoyo principal es, de nuevo, de la comunidad.
Arte Obrera es el proyecto matriz que nace en colaboración con el artista social y promotor cultural Antonio Ortiz Herrera –más conocido como Gritón–: Arteria, que convoca a pintores y escultores consagrados a trabajar en un estudio abierto al público, creando un intercambio y enriquecimiento creativo en el que se permite la reflexión y la autocrítica que tanta falta hace en este país.
En Arteria han participado artistas como Alberto Castro Leñero, Carolina Kerlow, César Núñez Guerra, Rubén Rosas, Elizabeth Ross, Fru Trejo, Jeannette Betancourt, Juan Trujillo, Luis Uribe, Magali Ávila, Patricia Soriano, Víctor Sulser, José Eduardo Barajas, Xuty, Mayra León, Gerardo Rivera Kura, Beatriz Canfield y René Freire, entre otros.
De la venta de un cuadro, 30 por ciento se aplica en becas para niños, 10 por ciento se reparte entre todos los artistas y 60 por ciento lo recibe el autor de la obra, noble proyecto, noble causa y generosos los artistas, frágiles y fuertes como especie ante la realidad que enfrentan.
Arte Obrera no pretende ser una galería formal; al contrario, busca generar un público que no tiene acceso a museos y galerías; para ello faltan recursos privados y gubernamentales a fin de continuar con becas dirigidas a niños y jóvenes de escasos recursos.
Larga vida para Arte Obrera.