Ciudad de México. La Iglesia no es progresista ni conservadora, ni de derechas ni izquierdas, es de Jesús, “no ideologicemos la casa de Dios. A la Madre no se le ideologiza, se le respeta y se le quiere”, sostuvo Francisco Javier Acero obispo auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, durante la misa dominical en la Basílica de Guadalupe.
En la homilía agregó que el clima está alterado porque “hemos sido indiferentes, debemos cuidar la casa común, quienes más sufren de los cambios climáticos son quienes menos tienen”. Hoy México sufre, dijo e hizo un llamado a preguntarnos si somos indiferentes, si hay solidaridad con quien sufre.
Hay regadas semillas de indiferencia, “poco me importa lo que pasa en el país, los muertos que hay, el dolor de las madres por sus hijos desaparecidos, es un camino pedregoso. Puede ser que se tenga la semilla de la ideología, creer que por ella al final todo se arregla. No, se marchita y se seca”. Dijo que a quienes acuden a la homilía “con sufrimiento, les decimos que no están solos”.
La Iglesia Católica ha comenzado la conmemoración por los 500 años de la llegada y presencia de los Franciscanos en México, con conferencias, talleres y conciertos, exposiciones, homenajes a personajes como Fray Pedro de Gante, quien abrió la primera escuela para indios de América, indicó por su parte el editorial del semanario católico Desde la fe.
En este aniversario se enmarca también la inauguración del Museo de la Parroquia de San Sebastián Atzacoalco, uno de los cuatro barrios en los que se dividió la Ciudad de México, y que tiene el nombre del museo de sitio.