El promedio real de los salarios contractuales aumentó 1.6 por ciento en junio, por lo que el poder adquisitivo de los trabajadores observó una mejoría por octavo mes consecutivo, de acuerdo con estadísticas oficiales.

Al cierre del primer semestre del año el promedio nominal del incremento salarial contractual se ubicó en 7.3 por ciento, dato que al descontar el efecto de la inflación representó un aumento de 1.6 por ciento, según información publicada por el Banco de México (BdeM), en conjunto con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

En junio la inflación fue de 5.06 por ciento a tasa anual, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Aunque fue el nivel más bajo del Índice Nacional de Precios al Consumidor en 28 meses, aún se encuentra fuera del objetivo del BdeM, el cual es 3 por ciento con un intervalo de un punto porcentual hacia arriba o hacia abajo.

El aumento del promedio real de los salarios contractuales se explicó en el sexto mes por la reducción de la inflación, lo que a su vez representa una mejoría en el poder adquisitivo de los trabajadores involucrados.

Con el dato de junio, los salarios contractuales suman ocho meses consecutivos de observar un alza real mayor a la inflación.

La proporción del aumento promedio real de junio fue menor si se compara con el 2.8 por ciento de abril y mayo, respectivamente.

El actual periodo de mejoría en el poder adquisitivo de los trabajadores comenzó en noviembre pasado, luego de que entre abril de 2021 y octubre de 2022 los salarios contractuales observaron un impacto por el mayor nivel inflacionario que causó el covid-19 y la guerra en Ucrania.

El periodo más extenso en el que los incrementos salariales contractuales fueron mayores a la inflación ocurrió entre noviembre de 2018 y marzo de 2021.

El BdeM indicó que durante junio se realizaron 279 negociaciones que involucraron a 169 mil 597 trabajadores, de los cuales 62 mil 627 fueron de empresas públicas y 106 mil 970 de privadas.

En promedio, los trabajadores de la iniciativa privada obtuvieron un incremento salarial nominal de 9.3 por ciento, mientras los funcionarios públicos consiguieron un alza en sus salarios de 4 por ciento.

El mayor incremento salarial en términos nominales fue de 10.3 por ciento para la industria manufacturera. Las negociaciones para este sector involucraron a 51 mil 789 trabajadores. El promedio para el resto de los sectores se ubicó en 6 por ciento.