Desde octubre de 2021 unas 60 familias fueron desplazadas de la comunidad de Guerrero Grande en el estado de Oaxaca. A casi dos años de ello, integrantes del Movimiento Nacional de Usuarios (MNU) enviaron cartas a la Secretaría de Gobernación y a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para solicitar a los titulares de esas instancias su intervención, con el fin de generar las condiciones de seguridad para el retorno a su poblado.
En las misivas demandaron generar condiciones para el diálogo con quienes actualmente residen en la comunidad. Piden a ambas dependencias su “intervención ante el gobierno del estado de Oaxaca para el retorno de nuestros compañeros a su comunidad Guerrero Grande, San Esteban Atatlahuca, distrito de Tlaxiaco”.
Indican que “las familias desplazadas viven en condiciones deplorables en el albergue del municipio de San Esteban Atatlahuca; que está siendo insuficiente para ellas, y necesitan de un espacio más amplio”, por lo que solicitan una “audiencia” para tratar el asunto.
Aseguran que el “Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas”, que asesora a quienes habitan ahora en la zona, “se ha mostrado reacio a retomar las pláticas para el retorno de las familias” y precisan que sólo la intervención de la SG y de la CNDH ante el gobierno de Oaxaca podría cambiar la situación y permitir “que las familias retornen a sus casas y puedan trabajar sus parcelas como lo han hecho desde siempre”.