Guatemala. El candidato a la presidencia por el Movimiento Semilla, Bernardo Arévalo, arrancó ayer su campaña para la segunda vuelta electoral en Guatemala, programada para el próximo 20 de agosto, en el que enfrentará a Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), tras superar una odisea judicial que inhabilitaba a su partido y puso en peligro su candidatura.
“Van a ser días difíciles de aquí hasta el 20 de agosto, vamos a tener que combatir la mentira y la desinformación”, aseguró Arévalo ante cientos de simpatizantes mayas en la plaza del poblado de Sololá, unos 200 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca.
Arévalo inició la campaña 19 días después de dar la sorpresa en la primera ronda electoral, y tras superar varios obstáculos legales, como una revisión de los escrutinios de los comicios del 25 de junio y una resolución de un juez que inhabilitó a su partido Movimiento Semilla y lo puso bajo investigaciones de la fiscalía.
Sobre la suspensión del partido, la Fiscalía Especial Contra la Impunidad alegó el miércoles que existen indicios de que posiblemente más de 5 mil ciudadanos fueron adheridos ilegalmente al Movimiento Semilla falsificando firmas, de las 25 mil que necesitaba para constituirse como partido político. La Fiscalía General allanó antier el Registro de Ciudadanos para buscar pruebas.
La fiscalía indicó ayer “que continuará la investigación correspondiente” y negó que sus acciones busquen interferir en la fecha de la segunda vuelta de las elecciones ni inhabilitar a candidatos, después de que la Corte de Constitucionalidad revocó el fallo judicial que suspendía a Semilla.
Arévalo aseguró que trabajará con los cuatro pueblos indígenas que integran este país: mayas, xincas, garífunas (negros del Caribe) y ladinos. “Vamos a construir una verdadera unidad para caminar todos juntos, que nadie se quede atrás y avanzar hacia el desarrollo y esperanza” del país, agregó ante gritos de “¡Viva Arévalo !”.