En las pasadas dos semanas, el Gobierno de la Ciudad de México ha cerrado 18 madererías y desmantelado más de 28 aserraderos clandestinos, como parte de las acciones para el combate a la tala ilegal en los bosques de Tlalpan y Milpa Alta.
El jefe de Gobierno, Martí Batres, aseguró que, además, se alcanzaron diversos acuerdos con el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, que ya comenzaron a materializarse, como el operativo de la Guardia Nacional en Tres Marías, municipio de Huitzilac.
Destacó que se mantiene la vigilancia, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, en la zona boscosa donde actúan los talamontes, no sólo por tierra, sino también con el sobrevuelo de helicópteros.
En general, señaló, se emprendieron un conjunto de acciones e iniciativas que han incluido reuniones con los comuneros de Xochimilco, Milpa Alta, Tlalpan y Cuajimalpa, así como la propuesta enviada al Congreso capitalino para establecer el delito de ecocidio para quienes talan ilegalmente en suelo de conservación, barrancas, áreas de valor ambiental o naturales protegidas.
“Entonces, ha habido bastante actividad en el combate a la tala de árboles. Y todos los días en la mañana recibimos un informe de la Guardia Nacional sobre el tema, así como de las secretarías de Gobierno y de Seguridad Ciudadana”, expuso.
En las semanas recientes, comuneros de Tlalpan y Milpa Alta denunciaron el incremento del saqueo ilegal de madera de la zona montañosa, lo que derivó en el bloqueos de carreteras.