Transportistas de 11 rutas de microbuses se manifestaron en el Zócalo con el fin de exigir al jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, su intervención para evitar actos de corrupción en los proyectos con los que se habilitarán los servicios zonales y la sustitución de los microbuses.
Entrevistado durante la manifestación, Sergio Alonso Balbuena, representante de la Ruta 1, señaló que 78 choferes y concesionarios resultaron afectados por la entrega irregular de los 480 mil pesos por bono de chatarrización que le correspondían a cada integrante de dicha agrupación, de lo cual responsabilizó al empresario y dueño del permiso para operar la línea 1 del Metrobús, Jesús Padilla Zenteno.
Indicó que esta persona tiene participación en 20 empresas de transporte, como en esa ruta del Metrobús que corre por avenida Insurgentes, “y continúa apropiándose de más títulos de concesión con apoyo de las autoridades”.
Aclaró que “nunca hemos rechazado participar en una empresa, lo que significaría cambiar nuestros viejos micros por autobuses; sin embargo, funcionarios nos dejaron fuera sin importar que cumpliéramos con todos los requisitos para sumarnos al nuevo corredor zonal de los Culhuacanes o a otros proyectos”.
Denunció que los bonos de chatarrización que debieron recibir se entregaron desde enero pasado a Mercedes Benz para la compra de 76 camiones, que sustituirán a una flota de 278 unidades viejas “que tienen un sobreprecio respecto al mercado, el cual se cargará a los participantes en la nueva línea de transporte”.
Juan Luis Sandoval Casales, concesionario de la ruta Tlalpan-Xochimilco, dijo a su vez que la ley obliga a que haya un acuerdo de intenciones, “pero aquí no es voluntad, es sometimiento lo que nos están haciendo para meternos a un consorcio”.
Con el servicio zonal el gobierno busca modernizar el servicio, “nos quieren pasar de microbuses a autobuses; el problema es que nos quieren imponer un camión chino de la marca Fotón, a diésel, que vale entre un millón 850 mil pesos y 2 millones de pesos, pero que nadie conoce”.
Por su parte, la Secretaría de Movilidad calificó de “grupos minoritarios” a los inconformes e indicó que uno “lo conforman ex concesionarios disidentes de las empresas de transporte Coaveo y Cotxsa, que fueron conformadas en la administración anterior”.
Otro grupo corresponde a quejosos de las zonas de Culhuacanes y Centenario-Águilas, de las rutas 84 y 57 respectivamente, quienes se han negado a la conformación de empresas zonales porque tienen conflictos internos.
La dependencia pidió a estos grupos “no emitir información falsa y ante los señalamientos hechos contra funcionarios, se reservan el derecho de emprender las acciones legales correspondientes”.