Michigan. Un documento escrito a mano por la cantante estadunidense Aretha Franklin y encontrado en su sofá después de su muerte en 2018 es un testamento válido en Michigan, concluyó un jurado, en un giro crítico en una disputa que ha enfrentado a los hijos de la cantante.
Es una victoria para Kecalf Franklin y Edward Franklin, cuyos abogados habían argumentado que los documentos fechados en 2014 deberían anular un testamento de 2010 que se descubrió casi al mismo tiempo en un gabinete cerrado con llave en la casa de La Reina del Soul en los suburbios de Detroit.
Aretha Franklin no dejó un testamento formal escrito a máquina cuando murió hace cinco años. Pero ambos documentos, con garabatos y pasajes difíciles de descifrar, surgieron repentinamente en 2019 cuando una sobrina de la artista recorrió la casa en busca de archivos.
Los administradores del patrimonio de Franklin han pagado facturas, liquidando millones en deudas tributarias y generado ingresos por medio de regalías musicales y otra propiedad intelectual. La disputa del testamento, sin embargo, era un asunto pendiente.
Hay diferencias entre las versiones de 2010 y 2014, aunque ambas parecen indicar que los cuatro hijos de Franklin compartirían los ingresos de la música y los derechos de autor.
Pero según el testamento de 2014, Kecalf Franklin y sus nietos obtendrían la casa principal de su madre en Bloomfield Hills, que estaba valuada en 1.1 millones de dólares cuando ella murió y hoy vale mucho más.
El testamento más antiguo señalaba que Kecalf, de 53 años, y Edward Franklin, de 64, “deben tomar clases de negocios y obtener un certificado o un título” para beneficiarse del patrimonio. Esa disposición no está en la versión de 2014.
Ted White II, que tocó la guitarra con Aretha Franklin, testificó en contra del testamento de 2014 y dijo que su madre generalmente haría que los documentos importantes se hicieran “de manera convencional y legal” y con la ayuda de un abogado.
Franklin fue por décadas una estrella mundial conocida por éxitos como Think, I Say a Little Prayer y Respect.