En la actual administración, México ha entregado más de un millón 900 mil instrumentos migratorios desde visas de carácter humanitario y trabajo temporal hasta visas permanentes y condiciones de refugiados, que han permitido integrarse a la vida cotidiana de nuestro país a personas de más de 100 nacionalidades, aseguró el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas.
El subsecretario alertó que “la enorme movilidad se expresa de manera más nítida en las solicitudes de refugio”, las cuales han pasado de 13 mil a 130 mil en una década, lo cual demuestra que “es un fenómeno que no se presentaba antes” e implica la urgencia de nuevas modalidades de integración para los solicitantes de refugio.
Como parte de las actividades del Encuentro Internacional de Movilidad Humana, Encinas apuntó que los flujos migratorios actuales requieren el desarrollo de políticas conjuntas en la región norte, centro y del Caribe en América, “para impulsar una nueva política migratoria”, como lo han sido los programas “Sembrando vida” y “Jóvenes construyendo el futuro”, pues aseguró que más del 60 por ciento de los beneficiarios de estos de Guatemala, Honduras y El Salvador han logrado mantenerse en su lugar de origen, en vez de salir de sus hogares.
Sin embargo, el representante de Protección de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en México, Josep Herreros, lamentó que la humanidad no mejore, porque “seguimos viendo millones de personas que huyen de sus hogares para salvar sus vidas, debido a la violencia”, por lo que agregó que tanto las instancias de gobierno como los organismos internacionales deben prepararse para dar respuesta y ofrecer la protección a las personas que lo solicitan al abandonar sus países.