Matamoros, Tamps., Familias que habitan en ciudades fronterizas tamaulipecas acudieron a que les tomaran muestras de sangre en módulos que la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas instaló en esta localidad, labor que también se realizará en Reynosa.
Jaqueline Cruz, directora general del Centro Nacional de Identificación Humana, dio a conocer que la recolección de muestras genéticas se realizó entre viernes y sábado de esta semana en el centro deportivo Eduardo Chávez de Matamoros, y continuará en Reynosa durante domingo y lunes.
“Es un método confidencial, en el que estamos recolectando una muestra de personas que tienen un familiar desaparecido, para conseguir sus perfiles biológicos y después confrontarlos con lo que hay en el sistema”, explicó.
De acuerdo con la funcionaria, además de la toma de muestras de sangre se pide a las familias que entreguen fotografías de su ser querido ausente, y participen en lo que denominan una entrevista de vida.
“Esto nos ayuda a recolectar de las familias una información que individualice a las personas que buscamos, tener un mayor contexto de a quién se está buscando”, detalló.
En Matamoros, donde la asistencia fue escasa, se obtuvieron 45 muestras de material genético entre integrantes de 16 familias.
Se espera que la respuesta sea mayor en Reynosa, donde las familias de desaparecidos están más organizadas. Integrantes del colectivo Amor a los desaparecidos, madres, esposas, hijas y hermanas de personas ausentes, hacen mucho más que compartir información en redes sociales, y hacen búsquedas de campo, como la que llevó a activistas a encontrar esta semana fosas irregulares en la colonia Ernesto Zedillo.
Ahí, madres rastreadoras con palas y picos, localizaron restos humanos calcinados, y dieron aviso a la fiscalía de Tamaulipas, que levantó las osamentas y las trasladó al Servicio Médico Forense.