El presidente Andrés Manuel López Obrador revisó con los gobernadores de la 4T estrategias para destrabar “recovecos” burocráticos y pueda llegar a los estados 11 mil millones de pesos para la rehabilitación de hospitales y 2 mil millones más para concluir caminos en zonas rurales.

Este jueves, los mandatarios locales emanados de Morena y partidos aliados acudieron a Palacio Nacional a una cita con el jefe del Ejecutivo federal donde se analizaron los avances del programa IMSS-Bienestar y en la construcción de vías rurales de comunicación en alguna entidades del país, así como el proceso de distribución de los libros de texto gratuito que para el próximo ciclo escolar estrenarán contenidos.

Al encuentro también fueron convocados integrantes de las áreas de salud, educación e infraestructura del gabinete federal; pero no los mandatarios de los estados gobernados por la oposición.

Al salir del cónclave, que se prolongó por casi dos horas y media, el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, indicó en entrevista que en el intercambio con el Ejecutivo federal se delinearon los pasos para resolver los pendientes en la estrategia federal para la federalización de la salud con el programa IMSS-Bienestar.

De ahí, dijo, que el mandatario federal se comprometió a transferir los recursos, que ascienden a 11 mil millones de dólares, para concluir las obras de rehabilitación hospitalaria y adquisición de equipo, así como recursos humanos, en las 14 entidades que ya se adhirieron a este programa y las otras que están por sumarse en los próximos meses.

En el caso de la infraestructura de caminos, agregó el mandatario sonorense, se estima que el presupuesto para las obras llegará de entrada a 2 mil millones de pesos.

De su lado, el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, indicó que en el caso de los libros de texto gratuito con los nuevos contenidos curriculares ha iniciado ya la estrategia para la entrega en preescolar y primaria, y en agosto comenzará la distribución de los de secundaria.

Estimó que para los niveles iniciales de educación básica serán unos 52 millones de libros, mientras para secundaria alrededor de 54 millones de materiales.