Jenin. El ejército israelí mató ayer a nueve palestinos, hirió a más de 100 y detuvo a otros 70 en Jenin, Cisjordania reocupada, durante una "amplia operación antiterrorista" que incluyó ataques con drones, en el contexto de una de las mayores incursiones en este territorio palestino en 20 años.
La operación Casa y Jardín lanzada por Israel contra presunta “infraestructura terrorista”, fue calificada por el presidente palestino, Mahmoud Abbas, de “un nuevo crimen de guerra contra nuestro pueblo indefenso” y provocó un éxodo.
Al cierre de esta edición unas 3 mil personas habían abandonado el castigado enclave donde los bombardeos cortaron el suministro de electricidad y agua.
Preocupación de la ONU
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Antonio Guterres, está “profundamente preocupado por los acontecimientos en Jenin”, y dijo que “todas las operaciones militares debe llevarse a cabo con total respeto por el derecho internacional”, señaló el vocero del organismo, Farhan Hag.
Un vocero de la Casa Blanca indicó: “hemos visto los informes y estamos monitoreando la situación de cerca”, y añadió: “apoyamos la seguridad y el derecho de Israel a defender a su pueblo contra Hamas, la Yihad Islámica, y otros grupos terroristas”, indicó The Independent.
En contraste, Egipto y Jordania denunciaron la ofensiva, y la Liga Árabe convocó a una reunión de urgencia para hoy.
El Ministerio de Sanidad palestino confirmó que al menos nueve personas murieron, y más de 100 resultaron heridas, 20 de ellas de gravedad, en Jenin. Más de siete decenas fueron arrestados, reportó el gobierno palestino.
Los ataques en Jenin provocaron protestas en toda Cisjordania reocupada, y en un puesto de control en la entrada norte Al Bireh, cerca de Ramalá, un palestino de 21 años fue abatido por disparos israelíes.
Entre las fallecidos hay menores
Entre los fallecidos figuran Nourudín Hussam Yusef Marshud, de 15 años, y Majdi Yunis Saud Araraui, de 17 años, indicó el Grupo Defensa Internacional de la Infancia-Palestina, que aseguró que la víctima mortal de más edad era Mohamed Muhanad, de 23 años.
Las fuerzas israelíes afirmaron que el blanco de sus bombardeos fueron una “infraestructura terrorista” y un “centro de operaciones conjuntas” que sirve como punto de comando de la Brigada de Jenin, unidad formada por grupos militantes en el abarrotado campo de refugiados de la ciudad.
Los disparos continuaban al cierre de esta edición en el campamento de refugiados palestinos contiguo a la ciudad de Jenin, en el norte de Cisjordania, territorio ocupado por Israel desde 1967.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, alegó que “Jenin se había convertido en los últimos meses en un refugio seguro para el terrorismo. Le hemos puesto fin”, y resaltó que sus fuerzas “han eliminado a los terroristas, detenido a individuos buscados, han destruido centro de mando y se han incautado de una importante cantidad de armas”.
Se jactó de que la incursión se ha desarrollado “en una de las zonas más densamente pobladas del planeta y se ha hecho con daños mínimos para los civiles y sin causar daño a personas que no estuvieron involucradas”.
Pero los residentes del área, que ha estado en el centro de una escalada de violencia durante el último año, dijeron que la infraestructura civil fue atacada.
“Hay bombardeos y una invasión terrestre”, dijo Mahmud al Saadi, director de la Media Luna Roja a Afp. “Varias casas y sitios fueron bombardeados (…) Hay humo por todas partes”, aseveró.
En el hospital de la ciudad una periodista de la Afp vio cuerpos en la morgue y familiares esperando el fin de los combates para poder celebrar lo funerales.
Residentes abandonan el campo de refugiados de Jenin, ayer, durante una operación militar israelí en la Cisjordania reocupada. Foto Afp.
“Comenzó a medianoche con bombardeos y luego grandes grupos de soldados atacaron Jenin desde diferentes entradas simultáneamente. Más tarde usaron excavadoras para abrir un camino a través de los vecindarios”, dijo a The Independent Mustafa Sheta, director del Freedom Theatre de Jenin.
Refirió que su teatro, un conocido centro comunitario y cultural, fue dañado por proyectiles que cayeron cerca mientras los civiles de la zona se refugiaban allí. “Las excavadoras llegaron a la calle a ambos lados del teatro; no sabemos el alcance del daño”, agregó.
El ejército israelí negó un ataque directo al teatro y replicó que solo atacaba objetivos militares y compartió imágenes de drones en Twitter que parecían mostrar el teatro intacto.
Los palestinos describieron la operación como una “guerra real” y una “invasión”. Sarah Abu al-Rob, una periodista palestina de Jenin, expuso: “esto es una invasión y un asedio, por primera vez desde 2002 el campamento está rodeado”.
Los drones se oían claramente y el sonido de disparos y explosivos se escuchaba en toda la ciudad horas después de los ataques, refirió Reuters.
El pueblo no se arrodillará: ANP
“Nuestro pueblo no se arrodillará, no se rendirá, no levantará la bandera blanca y se mantendrá firme en su tierra frente a esta brutal agresión”, dijo Nabil Abu Rudeineh, vocero del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) Mahmoud Abbas. Demandó una “acción internacional urgente para detener inmediatamente la ofensiva”. Por lo pronto, “el liderazgo palestino decidió hoy cortar todos los contactos con la parte israelí”, informó la agencia palestina Wafa.
Hamas se dice listo para intervenir
Las Brigadas de Jenin dijeron que enfrentaban a las fuerzas israelíes y que derribaron uno de los aviones no tripulados, mientras Hamas, que gobierna en Gaza, dijo que estaba listo para intervenir si Israel va demasiado lejos y “persiste en su agresión” en Jenin.
En algunos momentos de la mañana se pudieron ver al menos seis aviones no tripulados sobrevolando la ciudad y el campo contiguo, una zona densamente poblada que alberga a unos 14 mil refugiados en menos de medio kilómetro cuadrado.
“Lo que está ocurriendo en el campo de refugiados es una auténtica guerra”, dijo Khaled Alahmad, conductor de ambulancia palestino. “Hubo ataques desde el aire apuntando al campo, cada vez que llevamos entre cinco y siete ambulancias volvemos llenos de heridos”.
A medida que avanzaba la operación, excavadoras blindadas israelíes destrozaron caminos en el campo, cortaron el suministro de agua a la ciudad, informó el municipio de Jenin.
Un portavoz militar israelí indicó que la operación duraría todo el tiempo que sea necesario y las autoridades israelíes sugirieron que las fuerzas podrían permanecer durante días. “Una operación no termina en un día”, declaró a la radio del ejército el ministro de Energía, Israel Katz, miembro del gabinete de seguridad.
Ataques con drones
El ejército israelí no había utilizado ataques con drones en Cisjordania desde 2006 hasta el mes pasado, cuando el 21 de junio atacó cerca de Jenin.
La operación, en la que participó una fuerza descrita como "del tamaño de una brigada" -lo que sugiere unos mil a dos mil efectivos-, tenía por objeto ayudar a "acabar con la mentalidad de refugio del campo, que se ha convertido en un avispero", dijo el teniente coronel Richard Hecht, portavoz del ejército.
Israel capturó Cisjordania, que los palestinos consideran el núcleo de un futuro Estado independiente, junto con Jerusalén Este y Gaza, en la guerra de 1967.
Tras décadas de conflicto, las conversaciones de paz, auspiciadas por Estados Unidos, llevan congeladas desde 2014.
La violencia ha aumentado el último mes y, desde inicios del año han muerto al menos 185 palestinos, 25 israelíes, un ucranio y un italiano, según un recuento de Afp basado en fuentes oficiales.
Han ocurrido ataques con drones y batallas con armas de fuego entre las fuerzas israelíes y militantes palestinos en Yenín, después de que Israel lanzó una operación militar de gran escala en Cisjordania. Vía Graphic News.