Ardelio Vargas Fosado renunció la tarde de ayer a la Subsecretaría de Desarrollo Político de Puebla, horas después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que el funcionario estaba vinculado con el ex secretario de Seguridad Pública federal Genaro García Luna, preso en Estados Unidos por proteger a cárteles de la droga en México.
En su cuenta de Twitter, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina dio a conocer la dimisión. “El licenciado Ardelio Vargas Fosado me ha presentado su renuncia al cargo que venía desempeñando como subsecretario de Desarrollo Político en la Secretaría de Gobernación (Segob) de Puebla”, acotó.
El mandatario morenista llamó a Vargas Fosado “un poblano comprometido con su entorno y con su tiempo, un hombre institucional que, si bien nunca ha sido sentenciado por infracción o delito alguno, hoy, ante la información vertida en distintos medios y que es de dominio público, hace patente su convicción de abonar en la vida pública de Puebla separándose del cargo”.
El domingo pasado, el secretario de Gobernación local, Julio Huerta Gómez, renunció para buscar la candidatura del partido Morena a la gubernatura poblana, y en corrillos locales se especuló que a raíz de esta dimisión, por reglamento interno de la Segob, Ardelio Vargas podría eventualmente encabezar la dependencia.
Vargas Fosado fue jefe del Estado Mayor de la Policía Federal Preventiva durante el sexenio del panista Vicente Fox. En 2006 y 2007, mientras estaba en ese cargo, integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra fueron víctimas de represión en San Mateo Atenco, estado de México, cuando el priísta Enrique Peña Nieto gobernaba esa entidad.
También fue secretario de Seguridad Pública en los primeros meses de la gestión de Rafael Moreno Valle como gobernador de Puebla (2011-2017), y encabezó el Instituto Nacional de Migración cuando Peña Nieto era presidente de la República (2012-2018).
Recientemente, Ardelio Vargas fue acusado por ejidatarios del municipio de Pantepec de estar involucrado en una trama para despojarlos de sus tierras el pasado 30 de abril, sin tener en ese momento ninguna autoridad civil ni militar.
Además se mencionó que el “cacicazgo” de Vargas Fosado en la Sierra Norte de Puebla propició que su hija, Guadalupe Vargas Vargas, esté actualmente al frente de la presidencia municipal de Xicotepec.
Ayer por la mañana, el gobierno federal dio a conocer que alertó, en un informe que envío la semana pasada al gobernador de Puebla, Salomón Céspedes, sobre los “antecedentes” de Vargas Fosado.
Interrogado en la mañanera de ayer sobre este nombramiento, el presidente López Obrador recordó que en los gobiernos de la 4T no se desea ninguna relación con personas que hayan tenido vínculos con García Luna, “porque en ese entonces, para decirlo claro y rápido, breve, padecimos de un narcoestado que hizo mucho daño al país”.
Así, con respeto al ámbito y competencias, por tratarse de un nombramiento que corresponde a la administración estatal, se entregó la información referida.
“No sabemos si es culpable o no, pero sí trabajó en la Policía Federal, sí tuvo vínculos con García Luna”, expuso López Obrador.
Comentó que hace unos días la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, le dio a conocer la designación de Ardelio Vargas y se envió el informe a Salomón Céspedes, “respetuosos de su ámbito de competencia, porque esto corresponde a un gobierno estatal. Sí le presentamos un informe sobre esta persona que tiene esos antecedentes”.
Se preguntó a López Obrador si el gobernador atendió esa información, y respondió: “No sabemos todavía, pero ya se informó y es muy respetuoso este planteamiento”.