La falta de agua y la inseguridad pública en Ecatepec, Estado de México, son resultado de un rezago de 30 años en el que los gobiernos priístas de la entidad no hicieron nada para atenderlos, considera la diputada local morenista Luz María Hernández Bermúdez.

Al dar a conocer en exclusiva, que participará en el proceso interno del partido guinda para la renovación de la alcaldía en 2024, la legisladora aborda estos graves problemas que afectan al quinto municipios más poblado de México.

En el tema del agua, Hernández Bermúdez señala que es necesario que el gobierno del estado deje de controlar el suministro, por conducto del Sistema Cutzamala, “pues hay un acuerdo a nivel presidencial de que Ecatepec debe recibir aproximadamente mil litros por segundo y llega a solo un 40 por ciento”.

Subraya que “en Ecatepec” hay agua, incluso ya se hicieron pozos, pero parte de la población no accede a ella por “la corrupción, la falta de una reglamentación, no tenemos una Ley de Aguas estatal que norme y controle la administración del recurso”.

Plantea que “falta crear también iniciativas en las que se fomenten los estímulos fiscales para aquellas empresas y ciudadanos que utilicen y reutilicen el agua; ejemplo, el agua que se puede generar a través de los humedales artificiales, que hemos venido impulsando”.

Menciona que el aprovechamiento del agua con la captación de aguas pluviales es otra posibilidad, pero todo se ha quedado en iniciativas de buena fe que no han prosperado.

Luz María Hernández advierte que urge solucionar la grave problemática de la escasez del agua, ya que, dice, puede ser incluso llegar a ser tema de seguridad por toda la inconformidad que hay en la localidad, donde cada vez son más frecuentes las protestas, principalmente bloqueos de avenidas principales.

En ese sentido, la diputada morenista y ex dirigente estatal de ese partido, propone una reeingeniería para el tratamiento, mantenimiento y sanemamiento de la red hídrica y trabajar en los cambios legislativos que sean necesarios en la materia.

Apunta que debe haber estímulos fiscales, estímulos hacia la ciudadanía en favor de la cultura del cuidado del agua. También, agrega, es necesario, aunque a largo plazo, obras de gran magnitud, como es el cambio de la red, que ya está obsoleta.

Criticó el hecho de que se hayan construido pozos, pero no les haya invertido por cuestiones políticas.

En el rubro de la seguridad pública, Luz María Hernández Bermúdez, comenta que es necesario atender el problema del robo en el transporte público, sobre todo en el Mexibus, que es el que presenta el mayor índice.

Reprueba que no exista una coordinación que garantice la seguridad de los usuarios, como sí ocurre en la Ciudad de México.

“En Ecatepec hay un asalto y muchas veces las personas afectadas prefieren no ir a denunciar porque saben que van a ser horas de pérdidas y no va a haber resultados”.

Propone implementar células de atención y respuesta inmediata, así como la instalación de cámaras de seguridad que realmente sí funcionen y no sean simulación; “que baya una vigilancia permanente”.

Reconoce que en el sector falta mucha inversión, producto de un regazo de 30 años: se carece de alumbrado, infraestructura, vigilancia, y sobre todo controles de seguridad, con apoyo de la tecnología.

“A veces sí los hay pero no funcionan, no tienen mantenimiento o la ciudadanía desconocen que existen, debido a una deficiente campaña informativa”, apunta.

Humedales

Luz María Hernández Bermúdez es integrante de la comisión legislativaa del Medio Ambiente y Cambio Climático, desde donde promueve la creación de humedales artificiales con la finalidad de hacer productivo el tratamiento del agua que se va a reutilizar.

Explicó como parte de este proyecto se ha venido trabajando con expertos de la UNAM y el Conacyt y se ha demostrado que los humedales artificiales sí funcionan.

Puso como ejemplo el humedal del Bosque de Aragón, en la alcaldía Gustavo a Madero de la Ciudad de México, y que funciona a tal grado que el nivel de potabilidad del agua llega a entre un 90 y 95 por ciento.

Y tan es así que de estar un lago muriéndose, se transforma en un humedal que da vida. “Es un sueño que tenemos que hacer realidad”, expresó.