Atenas. El líder del partido conservador Nueva Democracia, Kyriakos Mitsotakis, se comprometió a agilizar las reformas tras su victoria aplastante ayer en las segundas elecciones en Grecia en cinco semanas, la cual le dio una cómoda mayoría parlamentaria que le permite formar un gobierno para un segundo periodo de cuatro años.
Simpatizantes jubilosos se reunieron frente a la sede de la fuerza política en Atenas, vitoreando, aplaudiendo, con fuegos artificiales y ondeando banderas azules y blancas del partido. Los resultados preliminares muestran que Nueva Democracia ganó poco más de 40.5 por ciento de los votos, aplastando a su principal rival, el de izquierda Syriza, que pasaba apuros para llegar a 18 por ciento, dos puntos porcentuales debajo de los comicios en mayo.
“Con el resultado electoral de hoy, Grecia abre un capítulo nuevo e histórico en su camino”, sostuvo Mitsotakis, de 55 años, en una declaración televisada. Los votantes, señaló, “nos dieron un firme mandato para que avancemos más rápido en el camino de los grandes cambios que necesita nuestro país. En una forma sonora y madura han cerrado un ciclo traumático de mentiras y toxicidad que frenó al país y dividió a la sociedad”.
En el contexto de los comicios está el suceso del barco con migrantes que se hundió frente a la costa occidental de Grecia, siniestro que dejó cientos de muertos y desaparecidos, y generó cuestionamientos sobre las medidas de las autoridades griegas y la estricta política migratoria. Pero la tragedia –de las peores en el Mediterráneo en los años recientes– no afectó a las elecciones, siendo los problemas económicos el ieterés central.
Se pronostica que el partido de Mitsotakis gane 158 de los 300 escaños del Parlamento, debido a que la ley electoral ahora otorga bancas adicionales al partido ganador. En los comicios de mayo, bajo un sistema de representación proporcional, le faltaron cinco escaños para obtener la mayoría pese a que recibió casi 41 por ciento de los votos, y decidió obtener un mandato popular más firme mediante segundas elecciones en lugar de formar un gobierno de coalición.
Sin embargo, ayer la participación electoral fue baja (53 por ciento), en comparación con poco más de 61, de mayo.
En total, ocho partidos superaron el umbral de 3 por ciento para ingresar al Parlamento, incluido uno religioso y otro de extrema derecha respaldado por un ex legislador encarcelado del Partido Amanecer Dorado, inspirado en los nazis y ahora proscrito.
Mitsotakis hizo campaña basándose en una plataforma de asegurar el crecimiento económico y la estabilidad política, mientras Grecia se recupera gradualmente de una crisis financiera brutal de casi una década.
Su principal rival, Alexis Tsipras de 48 años, fue primer ministro de 2015 a 2019, parte de los años más turbulentos de la crisis financiera griega. Un apagado Tsipras declaró ayer: “Obviamente los resultados electorales son negativos para nosotros”, y señaló que dependerá de los miembros del partido decidir cuál será el destino de él, y el rumbo que el instituto político debe tomar.
Los presidentes de Estados Unidos, Joe Biden, y de Francia, Emmanuel Macron, felicitaron por separado a Mitsotakis por su victoria.