Moscú. El jefe de las fuerzas mercenarias de Wagner, Yevgeny Prigozhin, se trasladará a Bielorrusia en virtud de un acuerdo mediado por el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, para poner fin a un motín armado que Prigozhin lideró contra la cúpula militar rusa, informó el sábado el Kremlin.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró a periodistas que Lukashenko se había ofrecido a mediar, con la aprobación del presidente ruso, Vladimir Putin, porque conocía personalmente a Prigozhin desde hacía unos 20 años.
Peskov refirió que se archivaría la causa penal abierta contra Prigozhin por amotinamiento armado, y que los combatientes de Wagner que habían participado en su "marcha por la justicia" no se enfrentarían a ninguna acción, en reconocimiento de sus anteriores servicios a Rusia.
Los combatientes que no habían participado firmarían contratos con el Ministerio de Defensa, que ha estado tratando de poner a todas las fuerzas voluntarias autónomas bajo su control antes del 1 de julio.
Aunque Putin había prometido anteriormente castigar a quienes participaran en el motín, Peskov dijo que el acuerdo había tenido el "objetivo superior" de evitar la confrontación y el derramamiento de sangre.
Peskov declinó decir si se había hecho alguna concesión a Prigozhin, aparte de garantías de seguridad para él -para las que Putin dio su palabra- y para sus hombres, para persuadirle de que retirara todas sus fuerzas.
Calificó de "trágicos" los acontecimientos del día.
"No hay más condiciones de las que pueda hablarles", dijo Peskov.
Prigozhin había exigido anteriormente que le entregaran al ministro de Defensa, Sergei Shoigu, y al jefe del Estado Mayor, Valery Gerasimov.
A la pregunta de si habría cambios de personal en el Ministerio de Defensa ruso como consecuencia del acuerdo, Peskov respondió:
"Estos asuntos son prerrogativa exclusiva y competencia del Comandante en Jefe Supremo (Putin) de acuerdo con la Constitución de la Federación Rusa. Por lo tanto, es improbable que estos temas hayan podido discutirse en el curso de los contactos mencionados".
Los mercenarios abandonan Rostov
Los combatientes del grupo Wagner han abandonado la ciudad de Rostov del Don, en el sur de Rusia, y se dirigen de nuevo a sus campamentos, informó el gobernador regional.
Los mercenarios rusos fuertemente armados que avanzaron la mayor parte del camino hacia Moscú comenzaron a retroceder el sábado, eliminando un importante desafío al poder del presidente Vladimir Putin, bajo un acuerdo que su líder y el Kremlin dijeron que evitaría el derramamiento de sangre.