Por segundo día consecutivo, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a que en el acto de celebración del quinto aniversario de su triunfo electoral no haya oportunismos, ni zalamerías proselitistas a favor o en contra de quienes aspiran a sucederlo. Hay motivos para celebrar –expuso– porque en este lapso se ha avanzado en la transformación, la economía está sólida pero hay que aplicarse en el último periodo de su gestión.
Consideró que entre sus “hermanos” que participan en la contienda para ser designados como coordinador de los Comités de Defensa de la Transformación “son gentes serias, muy responsables, pero, de todas maneras, no vayan a salir algunos zalameros, ya ven que siempre hay, los que quieren quedar bien. O ahora que están de moda los publicistas, que no hay que hacerles caso porque esos pueden llevar a dirigentes al fracaso”.
Irónico, comentó que esos publicistas son los que recomiendan a los políticos “Ríete, abraza, besa a este niño, monta bicicleta, quítate la camisa para que vean que estás fortachón, muévele la panza, le muevo la barriga”.
Al insistir en que quienes asistan al Zócalo no lo hagan en calidad de porristas de alguno de los aspirantes, López Obrador subrayó que su movimiento no surge recientemente, pues es heredero de las luchas de los campesinos, trabajadores y estudiantes en el pasado, quienes fueron los precursores.
Esto es, añadió, “la única cosa es que no haya politiquería. Ahora que está el proceso de las encuestas, que no vayan a ir ahí a echar porra, ¿no?, a aplaudir más o, lo peor, a ofender a otros. No, es la conmemoración del triunfo por la transformación, eso está por encima de cualquier interés personal, por legítimo que sea”.
Al reivindicar que la gente está contenta porque hay una economía sólida, la inflación mantiene su tendencia descendiente, hay empleos y se avanza en la lucha contra la corrupción dijo que aún falta el último tramo de su gobierno.
–¿Está satisfecho?
–Estoy muy satisfecho, desde luego, falta, ¿no? Me tengo que seguir aplicando para no dejar pendientes, obras inconclusas, pero vamos bien.