La peor sequía en el Medio Oeste de Estados Unidos desde 2012 se prolongó la semana pasada, mientras la falta de lluvia en el corazón del cinturón agrícola amenaza los cultivos de maíz y soya recién sembrados, señala un informe semanal de climatólogos.
De acuerdo con el Monitor de Sequía de Estados Unidos, las precipitaciones menores al promedio y los fuertes vientos también exacerbaron las condiciones de sequía en gran parte de la región de las altas llanuras, desde Dakota del Norte –principal productor de trigo de primavera–, hasta Kansas, el mayor productor de trigo de invierno.
Cerca de 64 por ciento de la superficie de producción de maíz y 57 por ciento de la de soya resultaron afectadas por la sequía esta semana, frente a 57 y 51 por ciento de la semana anterior, respectivamente, señaló el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Además, la preocupación por el seco comienzo de la temporada de cultivos de verano en Estados Unidos y la posible escasez de cosechas han disparado los precios del maíz y la soya a máximos de varios meses, pero ambos cultivos aún podrían recuperarse con lluvias oportunas.
En Argentina, por cuestiones climáticas, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires bajó su previsión de de maíz 22-23 a 34 millones de toneladas, desde 36 millones previos.