París. El Banco Mundial (BM) anunció ayer que facilitará financiamiento a los países afectados por catástrofes naturales, mientras el Fondo Monetario Internacional (FMI) informó que alcanzó su objetivo de poner 100 mil millones de dólares en líneas de crédito a disposición de países vulnerables.
Los dos anuncios se hicieron en la Cumbre para un Nuevo Pacto Mundial de Financiación, que se realiza en París, convocada por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y que reúne a unos 40 líderes, entre ellos una docena de África, el primer ministro de China y el presidente de Brasil, así como al líder de Naciones Unidas, con el fin de impulsar una nueva agenda financiera mundial.
El objetivo es aumentar el financiamiento de crisis para los países de ingresos bajos y aliviar la carga de su deuda, reformar los sistemas financieros de posguerra y liberar fondos para hacer frente al cambio climático.
Los líderes están dispuestos a respaldar una iniciativa para que los bancos multilaterales de desarrollo como el Banco Mundial pongan más capital en riesgo para impulsar los préstamos, según un borrador de comunicado de la cumbre al que tuvo acceso Reuters.
“Ningún país debe tener que escoger entre reducir la pobreza” y proteger el planeta, aseguró Macron, al inaugurar la cumbre. “Debemos abordar estos dos desafíos al mismo tiempo”, afirmó y conminó a todos los países a “estar a la altura” y “ser responsables” de sus acciones.
El objetivo de la cumbre se anuncia ambicioso: crear músculo financiero para combatir tres crisis interconectadas, como son la lucha contra la pobreza, la descarbonización de la economía y la protección de la biodiversidad, según Macron.
A los pies de la Torre Eiffel, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, enfatizó que los países ricos “contaminaron el planeta en los últimos 200 años, al hacer la revolución industrial”, y que por eso deben asumir ahora “la responsabilidad de financiar a los países en desarrollo” que poseen los bosques indispensables para enfrentar el calentamiento global.