La oportunidad de alcanzar a Cuba en la cima del medallero en los Juegos Centroamericanos y del Caribe está más al alcance que nunca. Oficialmente hoy quedará inaugurada la justa regional más antigua del orbe, y la delegación mexicana, una de las más grandes entre las 36 naciones que estarán compitiendo, tendrá una ocasión inmejorable en El Salvador para empatar en 12 títulos a los cubanos.
El sentir entre los integrantes que componen el equipo nacional es que se puede conseguir esta meta. Al menos así lo considera Paola Longoria, quien lideró por 11 años seguidos el ranking mundial de raquetbol hasta el domingo pasado.
“Tenemos una delegación tan exitosa que obviamente siento que podemos alcanzarlos en victorias en estos Juegos, pero lejos de ponernos esa presión, es simplemente salir con la motivación de que México tiene un gran potencial para lograrlo. Contamos con atletas olímpicos, panamericanos y campeones del mundo que van con esa experiencia de ir a sacar todo por nuestro país. Creo que se puede dar ese récord y estamos para grandes cosas”, afirmó Longoria.
Desde 1926, cuando se creó este certamen, la pelea por la supremacía se ha reducido entre los dos países.
En 23 ediciones, los antillanos lideran el medallero histórico con mil 752 oros y 3 mil 320 preseas en total. México, por su cuenta, contabiliza mil 367 doradas y 3 mil 878 podios. La diferencia es que Cuba se ha perdido tres citas centroamericanas, mientras el contingen-te mexicano, ninguna.
Superar límites
Desde otra trinchera, Liliana Ibáñez, la deportista tricolor que más metales logró hace cinco años en Barranquilla (cinco oros, una plata y tres bronces), justa en la que México, con 132 áureas, venció por primera vez en casi medio siglo a Cuba (102), manifestó que, lejos de pensar en igualar a otra delegación, lo importante será que cada uno de los integrantes apunte en dirección a superar sus límites personales.
“Deseo que disfruten de su participación y que cada uno busque el récord personal, que salgan siendo mejor de lo que llegaron, eso sería todavía más importante que ganar el medallero, es lo mejor que les podemos pedir”, alentó la nadadora.
Ibáñez y Longoria comparten una cadena de similitudes que no podrán coincidir en El Salvador y República Dominicana (Santo Domingo), subsede de algunas competencias. Son dos de las deportistas más laureadas en Centroamericanos y forman parte de las atle-tas a quienes fueron retiradas sus becas por la Conade. De no ser por Liliana, quien no participará en esta ocasión, ambas iban por su quintos Juegos.
“Me hubiera gustado estar ahí, hace tres meses aún estaba en el debate de si ir o no, pero mi mente ahora está en otro lado, pensando en las justas que tengo por delan-te, enfocada en París 2024”, aseguró.
En el caso de Longoria, la motivación está a tope pese a lo “decepcionante” que resulta que no te “paguen tus becas”. Independien-te a esta problemática que tiene sin estímulos a los deportes acuáticos y al raquetbol, la ilusión sigue intacta para Paola; la encomienda es colgarse su quinto oro en singles y llegar a 11 preseas en total.
“El objetivo está claro y es volver a refrendar el título en individual.”
Natación, con 43 podios, fue la disciplina más premiada en Barranquilla; nueve fueron de Liliana.
En segundo y tercer sitios se ubicó el tiro (27 medallas) y el taekwondo (20). Gimnasia rítmica, natación artística, raquetbol, remo, tiro con arco, ecuestre y triatlón también sumaron buenos dividendos.
El beisbol, a saldar deuda
La disciplina que está en deuda con México es el beisbol. El primer lugar es un resultado que históricamente se le ha negado a la novena nacional. Seis platas y tres bronces son el registro. Dentro del combinado nacional, sin embargo, existe la convicción de que en suelo salvadoreño se romperá el maleficio. “Esta plantilla está bien conformada y tenemos todo para ir a pelear la medalla de oro. Sabemos que se nos ha escapado y queremos darle una alegría a la afición”, aseguró el mánager Enrique Che Reyes.
El tiro con arco tiene mucho que ofrecer con una selección femenil que actualmente se encuentra en el tercer lugar del orbe. En palabras de la arquera Ana Paula Vázquez, quien se encuentra lesionada y fue parte de las s eleccionadas que estuvieron en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, no tienen duda de que sus compañeros y compañeras tienen todo para dominar la disciplina. Confía en las flechas de Aída Román, Alejandra Valencia y Ángela Ruiz.
“Veo al grupo de mujeres muy fuerte, pero también al de hombres; creo que pueden llegar a hacer grandes cosas. En individual y en equipo, México tiene todo para llegar ahí (podios), hay potencial, integrantes, experiencia y ganas.”
En Barranquilla 2018, la comitiva tricolor obtuvo el récord de más medallas doradas (132). Para esta ocasión, la cosecha de primeros lugares que se esperan, según lo confirmado por María José Alcalá, presidenta del Comité Olímpico Mexicano, son 90.
El estadio Nacional en San Salvador realizará hoy la ceremonia de apertura para un certamen en el que competirán más de 5 mil 500 deportistas, de los cuales 646 serán mexicanos. La clausura será el 8 de julio.