A unos días de que la Asamblea General de las Naciones Unidas debata por trigésima ocasión el proyecto de resolución "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”, el embajador del país caribeño en México, Marcos Rodríguez Costa, sostuvo que la hostilidad del vecino del norte contra la isla se ha incrementado, con una política “criminal” que atenta contra la población.
Frente a las repercusiones que tiene el bloqueo, agradeció el respaldo mostrado por “el pueblo y el gobierno mexicano” tanto en este contexto, como en los momentos más difíciles de la pandemia y perfiló que una de las vías que busca tanto Cuba como toda Latinoamérica para reducir la dependencia de insumos de Estados Unidos, es la integración de la región.
En conferencia de prensa en la embajada cubana en México, recordó que el próximo 2 y 3 de noviembre la Asamblea General de las Naciones Unidas analizará nuevamente la petición para concluir el bloqueo.
La discusión se presenta en un contexto especial “marcado por los efectos devastadores en Cuba por el huracán Ian, por los efectos de una crisis global multidimensional que incluye una crisis económica internacional, una amenaza inminente de recesión global, crisis energética y de salud”, así como en un escenario “de recrudecimiento sin precedentes del bloqueo contra Cuba”, recalcó.
Al retomar parte de lo expuesto hace un par de semanas por el Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Cuba, Bruno Rodríguez, al momento de presentar la actualización del informe sobre la resolución 75/289 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Rodríguez Costa explicó que desde la segunda mitad del 2019 se acentuó una política de “asfixia económica” con la intención de “buscar deliberadamente el colapso del economía cubana y del país, sin medir las graves consecuencias humanitarias ni los impactos de ese objetivo que nunca se cumplirá, pero que provocaría sin lugar a dudas consecuencias impredecibles”.
Desde entonces, adujo el diplomático cubano, el bloqueo “ha sido quirúrgicamente mejor diseñado, tomando como blanco cada uno de los principales ingresos de Cuba, buscando con saña incrementar el impacto en la vida cotidiana de nuestra población”.
Mientras las más de 200 sanciones adicionales de bloqueo aplicadas por la administración de Donald Trump buscaron dichos objetivos, hoy la política del gobierno de Joe Biden “es lamentable e inercialmente la misma política” que la aplicada por los republicanos.
Tan sólo en los primeros 14 meses del gobierno de Biden, los perjuicios ocasionados por el bloqueo ascienden a la cifra de 6 mil 364 millones de dólares, lo que representa un récord histórico de acuerdo con las estimaciones hechas por Cuba. Ello representa más de 454 millones de dólares mensuales o más de 15 millones de dólares diarios, en daños y perjuicios.
En seis décadas los daños acumulados se calculan hasta en 1 billón 391 mil 111 millones de dólares, añadió.
Además de “los daños extremos” del bloque, aseveró que éste busca privar a la isla de ingresos financieros necesarios para adquirir tecnología.
Tras recordar que el sistema energético cubano se afronta dificultades, resultado en parte de los obstáculos para adquirir piezas de repuesto, detalló que el bloque contempla la prohibición de comerciar con Cuba tecnología, piezas o equipo que tenga al menos un 10 por ciento de componentes de manufactura estadunidense.
También, ponderó que ante dichos retos, “Cuba sigue teniendo muchos amigos, entre ellos el gobierno y el pueblo mexicano dispuestos a dar su apoyo y su solidaridad para levantar esta política irracional que sufre el pueblo cubano por más de 60 años. Por eso nuestro pueblo cubano agradecerá eternamente al pueblo mexicano, y a tantos otros por esa actitud hacia Cuba”.
Como parte de la colaboración que ha tenido Cuba con México, subrayó la participación de médicos cubanos en localidades mexicanas, pero agregó que “no es una cosa nueva, casi 600 mil médicos cubanos han viajado al mundo entero a más de 60 países prestando su colaboración y ayuda”. Apuntó que son más de 400 médicos que actualmente se encuentran en territorio nacional, “participando codo a codo” con sus colegas mexicanos en comunidades que lo requieren”.
Indicó que “es un programa que tiene un futuro, habría que ver las necesidades de México más adelante, pero hoy es un programa que avanza y que nosotros estamos contentos porque, además, impacta en la salud del pueblo mexicano. Cuando tengamos que tomar la cifra de operaciones realizadas, de consultas realizadas, de vidas salvadas, va a dar una idea de para qué vinieron los médicos cubanos”. Se trata de un programa “hecho para ayudar al pueblo mexicano”, expuso el embajador.
Asimismo, consideró que todos los países latinoamericanos buscan vías para “atenuar la innegable dependencia de un país como Estados Unidos”. Eso, dijo, se refleja en la defensa de sus propios recursos naturales y cambiar de una economía concentrada en la exportación de materias primas.
“Nosotros tenemos que protegernos contra un país tan grande, contra las corporaciones y las grandes transnacionales”. aunado al sentimiento regional en Latinoamérica en busca de “unir nuestros recursos y nuestras posibilidades, no para enfrentar el imperio, sino para no tener una dependencia total de un país como Estados Unidos”.
Confió en que el triunfo de Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones presidenciales de Brasil lleve a una mayor integración latinoamericana.