La Paz, BCS., El comité ejecutivo de la sección 3 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) convocó a un paro de labores en todas las escuelas de educación básica de Baja California Sur, del 31 de octubre al 3 de noviembre, en demanda de la creación de 3 mil plazas para maestros compensados, entre otras peticiones planteadas a los gobierno federal y estatal.
Esta medida es la continuación del paro de labores realizado el jueves y viernes pasados, que tuvo como resultado la apertura de una mesa de negociaciones con las autoridades federales y estatales, la cual incluyó pláticas con el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y el presidente Andrés Manuel López Obrador, durante la visita de ambos a la entidad.
Asimismo, se acordó que la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Leticia Ramírez Amaya, acuda a la capital del estado el 5 de noviembre para dialogar con la dirigencia de la sección 3 del SNTE.
Elmuth Castillo Sandoval, secretario general del SNTE en el estado, informó a los trabajadores de la educación y al presidente López Obrador que los principales planteamientos al gobierno federal, además de las 3 mil plazas, son el mejoramiento de las condiciones del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) en Baja California Sur, y la revisión y modificación de la Ley de la Unidad del Sistema para la Carrera de Maestras y Maestros.
El dirigente también pidió más presupuesto para la educación en Baja California Sur y solicitó al mandatario federal que apoye a la administración estatal.
López Obrador se comprometió a atender las peticiones del magisterio sudcaliforniano, para lo cual anunció la visita de la titular de la SEP y del oficial mayor de la dependencia, que junto con el gobernador morenista Víctor Manuel Castro Cosío tratarán el tema de las plazas.
Mencionó que el asunto del Issste lo revisarán más adelante, pero ya se está atendiendo a escala nacional, pues esa institución fue “saqueada” por anteriores gobiernos.
Los profesores compensados tienen un sueldo menor a pesar de realizar las mismas funciones que un maestro con base; no generan antigüedad, no cuentan con las prestaciones de ley ni con créditos para de vivienda.