El Poder Judicial Federal (PJF) “ha demostrado y seguirá demostrando ser independiente del poder político, pero también de los poderes fácticos no somos gobierno, pero tampoco somos oposición. ¡No nos hemos dejado utilizar y no nos dejaremos utilizar! Reitero que nuestro único compromiso es con la Constitución y con los derechos humanos. Nos avalan nuestras sentencias nos respalda nuestro trabajo de todos los días.
“A los críticos les pido una vez más que nos critiquen por nuestra sentencias, que nos critiquen por nuestro trabajo, no por sus elucubraciones fantasiosas que sólo buscan desprestigiar a una de las instituciones más importantes del Estado mexicano, y una de las instituciones esenciales en la consolidación de nuestra democracia”, afirmó el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, al inaugurar la XVII Asamblea general ordinaria de la Asociación Mexicana de Impartidores de Justicia (AMIG).
En un acto que tiene lugar en la ciudad de Toluca, el también presidente del PJF señaló: “se ha hablado mucho de la independencia del Poder judicial Federal, se ha pretendido utilizar la independencia del Poder Judicial como un instrumento de golpeteo político y de arma política entre adversarios polarizados.
“Se dice por un lado que jo se defiende la independencia de jueces y juezas federales, y por el otro se afirma que el Poder Judicial Federal no es independiente y que se encuentra sometido a los otros poderes, tanto la defensa de la independencia judicial como el acreditamiento de esta independencia se da a través de la sentencias que todos los días.
“Los jueces y juezas federales no requieren que se les defienda en la en la plaza pública, ellos y ella se defienden todos los días con sus sentencias, y nosotros acreditamos todos los días con nuestras sentencias que somos independientes.
“El PJF, la SCJN, los tribunales colegiados de circuito y los juzgados de distrito, todos los días y cada día, dictamos resoluciones autónomas e independientes en las que demostramos que nuestro único compromiso es con la Constitución y con los derechos humanos.
“Toda resolución sobre todo en asuntos delicados, conflictivos, puede ser opinable y discutible, esto pasa en todos los países del mundo, pero no es correcto éticamente ni políticamente descalificar el trabajo de los jueces cuando ese trabajo no es acorde a determinada pretensión económica o política”.
Zaldívar aseguró: “estamos en una sociedad polarizada no sólo políticamente si no ideológicamente en la cual se debate como en todo el mundo el futuro de nuestros derechos, la ola anti derechos bien financiada y con un plan muy claro y que le está dando resultados en otros países, está ahí al acecho tratando de ganar terreno para revertir derechos que pensábamos ya no era posible revertir”.
Por ello, añadió, “en todo esto el papel de las y los jueces y a los jueces es de la mayor relevancia a los jueces y juezas nos corresponde ser instrumento de paz social pero también nos corresponde ser la última esperanza de la gente.
“Una sociedad que no confía en sus juezas y jueces, es una sociedad que carece de futuro y es una sociedad que carece del mínimo entusiasmo para poder salir adelante.
“En el Poder Judicial Federal hemos hecho la parte que nos corresponde, estos cuatro años hemos consolidado un poder judicial independiente, profesional, moderno, cercano a la gente hemos avanzado en la paridad de género y en medidas estructurales para lograr una igualdad de género en todo el poder judicial”.
En su intervención, el gobernador mexiquense Alfredo del Mazo Maza, refirió que la SCJN y los poderes judiciales son reconocidos como pilar de la democracia y como los principales defensores de nuestros derechos constitucionales. Por la magnitud de este desafío, la renovación de la justicia en nuestro país ha sido una tarea ardua y permanente para consolidar los avances es necesario que la relación entre los impartidores de justicia y la ciudadanía a la que sirven se realice con base en una relación de confianza y credibilidad y cercanía.
Aseguró que sólo a través de la promoción, el respeto y la protección de los derechos humanos cumpliremos con nuestros preceptos constitucionales, impulsaremos la igualdad de oportunidades y facilitaremos la inclusión de todas las personas en una sociedad más equitativa y más justa.