La Fiscalía General de la República (FGR) ganó un juicio de extinción al narcotraficante Rafael Caro Quintero respecto de cinco bienes inmuebles ubicados en Zapopan, Jalisco.
Una vez que los bienes se vendan, los recursos deben compartirse con Estados Unidos, ya que fue ese gobierno el que solicitó empezar el juicio contra quien fue uno de los fundadores del cártel de Guadalajara.
Autoridades federales señalaron la posibilidad de que sus pares estadunidenses soliciten al gobierno mexicano compartir los bienes conforme a lo establecido en acuerdos binacionales, ya que desde 2019 el Departamento de Justicia de ese país pidió a las autoridades mexicanas que solicitaran el aseguramiento de las propiedades que estuvieron en litigio.
Este martes, la FGR dio a conocer que por medio de la Unidad Especializada en Materia de Extinción de Dominio (Uemed), obtuvo sentencia favorable en la que se declaró procedente el ejercicio de dicha acción en favor del gobierno federal.
Asimismo, el Ministerio Público Federal señaló que “el 25 de octubre de 2019, se presentó ante la Dirección General de Procedimientos Internacionales una petición del director de la división penal del Departamento de Justicia de Estados Unidos, mediante el cual solicitó asistencia jurídica internacional para el decomiso de inmuebles que se encuentran en Zapopan, Jalisco, respecto a los cuales se demandó la extinción de dominio en la corte de distrito este de Nueva York, toda vez que fueron adquiridos con recursos procedentes de la venta de narcóticos”.
El gobierno mexicano realizó los procedimientos necesarios para ganar dicho juicio, como notificación a los demandados, tomó las medidas necesarias para preservar los bienes asegurados y en su momento, en términos de la Ley Nacional de Extinción de Dominio, ejercitó la acción jurídica de los cinco inmuebles.
Agotado el procedimiento, el juzgado sexto de distrito en la materia, con competencia en la República mexicana y especializado en juicios orales mercantiles del primer circuito, con sede en la Ciudad de México, dictó sentencia favorable mediante juicio oral, declarando judicialmente la extinción de dominio de los cinco bienes inmuebles, propiedad de Rafael Caro Quintero.