El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo desconocer si está vigente la investigación relacionada con el operativo Rápido y Furioso en Estados Unidos en el que se involucra al ex presidente Felipe Calderón. "No tengo más información que está vigente, si está probado que llevaron a cabo este operativo. Se hizo una investigación en Estados Unidos".

Durante su conferencia de prensa insistió en que "no sé si esté vigente, suele pasar que allá dan carpetazo sobre asuntos no convenientes. De que existió esta operación, sí, y se enteraron en el gobierno de Calderón".

Cuestionado sobre las afirmaciones del secretario de Gobernación, Adán Augusto López en el sentido de que se estaba investigando a Calderón, el Presidente dijo que "no tengo más información sobre esto. La Fiscalía seguramente debe de saber qué investigaciones hay abiertas. Ya saben ustedes cuál es mi postura sobre los ex presidentes".

Recordó que en su momento se sometió a consulta la posibilidad de enjuiciar a los ex presidentes pero no votó el número de ciudadanos requerido legalmente para que tuviera carácter vinculatoria. López Obrador recordó que el operativo fue un acuerdo bilateral de Mexico y Estados Unidos mediante el cual se introdujeron armas de forma clandestina con sensores, supuestamente para que cuando llegaran a los delincuentes se identificara quiénes las usaban y se les detuviera.

Describió que en ese entonces el gobierno estaba tomado por la delincuencia organizada "y también por la delincuencia de cuello blanco". En términos operativos, dijo, de eficacia policiaca, tenía justificación ese operativo. ¿Qué pasó? Antes de que llegaran armas a los delincuentes ya sabían "porque el gobierno estaba totalmente infiltrado por la delincuencia".

López Obrador hizo un largo repaso de la estrategia de seguridad de Calderón, cuando se declaró la guerra al crimen organizado. El problema de antes es que se vincularon en muchos actos ilícitos, "incluso vinculaciones ilícitas entre gobiernos. El operativo a Rápido y Furioso es a todas luces ilegal, violatorio de nuestra soberanía. Eso se pactó entre los gobiernos de Estados Unidos y México".