La Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México dirigió a la Fiscalía General de Justicia la Recomendación 08/2022, por la omisión de garantizar el derecho de acceso a la justicia en la investigación de violencia feminicida y a una vida libre de violencia a Elisa Xolalpa Martínez, a quien su ex pareja le roció ácido y lleva 21 años en busca de justicia.

En la presentación de la recomendación, la presidenta de la CDHCM, Nashieli Ramírez Hernández, destacó que la ciudad es la segunda entidad federativa donde las mujeres de 15 años y más han experimentado mayor violencia a lo largo de su vida, con una prevalencia de 76.2 por ciento, solo después del estado de México.

Tal situación, dijo, vislumbra la problemática tan grave a la que nos enfrentamos, pues en los últimos cinco años ha aumentado, ya sea porque es más denunciada o ha subido, registrándose 11 asesinatos de mujeres al día en el país y en la ciudad, sólo de enero a junio de este año, se contabilizaron 71 mujeres asesinadas.

Además se han registrado 47 ataques con ácido o sustancias corrosivas en contra de las mujeres, de acuerdo con fuentes periodísticas, siendo la Ciudad de México, el Estado de México y Puebla las entidades que más reportan este tipo de violencia, que ya se incluyó en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, afirmó.

En el auditorio Digna Ochoa del organismo y ante la presencia Elisa, familiares y sus compañeras de las colectivas “Todas Somos Elisa” y “Justicia por ti, por mí, por todas”, la ombudsperson destacó que no es obligación de las victimas realizar el trabajo para la investigación de su caso o la transformación cultural de la comunidad.

La víctima tenía derecho a que las investigaciones se condujeran bajo perspectiva de género, con un debido análisis de contexto, con deber de debida diligencia reforzada e interculturalidad; sin embargo, la averiguación previa que levantaron las autoridades en noviembre de 2001, tras ser agredida por ácido, no existe y fue por lesiones dolosas.

En 2019, comentó Elisa, reapareció “mi agresor y las amenazas de quitarme la vida fue catalogada como violencia familiar, aunque las autoridades me revictimizaron por haber dejado pasar tanto tiempo y me dijeron que a lo mejor tenía problemas psiquiátricos y había inventado todo, por lo que pensé que la muerte era la mejor salida”.

El apoyo brindado por los colectivos y la CDHCM la hizo luchar para exigir justicia y evitar que este caso quede impune, pues fue víctima de violencia física, verbal y sicológica de quien fuera su pareja, lo que derivó en 2001 en que fuera golpeada y rociada con ácido por su agresor en la zona chinampera de Xochimilco, de donde es originaria.

La cuarta visitadora general de la Comisión, María Luisa García, señaló que el mismo día de los hechos, mientras ella se encontraba hospitalizada, un familiar presentó la denuncia correspondiente, y en 2005, la víctima inició su búsqueda de justicia.

La averiguación iniciada en la entonces Procuraduría General de Justicia está extraviada y su posibilidad de acceso a la justicia nula, por lo que se presentó una queja en 2020 ante la CDHCM, por lo que tras una investigación del caso se emite esta Recomendación.

La presidenta del organismo destacó que entre los puntos recomendatorios dirigidos a la FGJ destacan la inscripción de Elisa Xolalpa Martínez en el Registro de Víctimas de la Ciudad de México y se proceda a los planes de reparación integral junto con dos víctimas indirectas, y realizará una disculpa pública.

Además llevarse a cabo acciones encaminadas a que la víctima directa pueda ejercer sus derechos a la verdad y a la justicia para que los delitos en su contra no queden impunes; mientras, la Fiscalía para la Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos diseñará un plan integral de averiguación de la indagatoria relacionada con los hechos, dijo.

Hoy, destacó, el principal reto en las investigaciones vinculadas con violencia feminicida continúa siendo contextualizar la agresión sufrida por la víctima y acreditar las razones de género, mediante pruebas sólidas.