Ciudad de México. “Sólo les recuerdo que el viejo régimen nos dejó más de 50 millones de pobres, de los que no se hacen cargo”, respondió la secretaría de Bienestar, Ariadna Montiel, ante las críticas insistentes de la oposición que en el caso del PAN llegaron a las descalificaciones, durante la comparecencia de la funcionaria en el Senado de la República, para la glosa del Cuarto Informe presidencial.

La panista Guadalupe Saldaña, sostuvo que la política social es un fracaso, que en lugar de combatir la pobreza crea clientelas electorales, mientras que priístas, perredistas y senadores de MC, insistieron en que el número de pobres aumentó en casi 4 millones en estos cuatro años del gobierno de la Cuarta Transformación.

Reprocharon también la desaparición de programas para el campo, la cancelación de estancias familiares y lo que consideraron reglas poco claras en la asignación de los programas sociales.

La funcionaria resaltó que el criterio de primero los pobres es un principio y una convicción, “porque el problema en México es la mala distribución de la riqueza. Nosotros no tenemos una política de bienestar, de transferencias condicioanadas, como lo era Prospera”.

Si se habla, recalcó, de “uso electoral de los programas, ahí está Prospera, que operaba con gran opacidad a través de sus vocales.” y en contraste, “estamos consolidando un Estado que hoy se hace cargo de las desigualdades, y las combate de frente. Estamos eliminando la burocracia, con un subsidio directo a los beneficios.”

Desde el pleno del Senado, hizo notar que todos los Programas de Bienestar “tienen como prioridad a los los pueblos indígenas y hoy 3.6 millones de ellos, que viven en municipios con mayor presencia indígena, cuentan con un ingreso que les ha permitido enfrentar la pandemia del Covid 19 y hay algo muy importante” la política es es directa y sin intermediarios.

Y sí recalcó Ariadna Montiel, “eliminamos todos aquellos programas del campo que lo único que hacían era engordar las bolsas de los dirigentes campesinos, aprovechándose de la de la pobreza del medio rural. Quien estaba en deuda con el pueblo era el gobierno..Hoy trabajamos con los beneficiarios y derechohabientes de los programas con la confianza ciudadana, con un enfoque de derechos”.

En relación con cuestionamientos de Gustavo Madero, del Grupo Plural, expuso asimismo que los programas de bienestar tienden a la universalidad , no todos son universales y es el caso de las becas a discapacitados, no se ha logrado y sólo 6 de cada diez lo reciben porque no todos los estados de la república participan. Expuso que se trata de un derecho universal para los y las niñas, adolescentes y jóvenes menores de 30 años

Este año, precisó, se se alcanzó la meta de un millón de personas con discapacidad como derechohabientes, con una inversión social de 20 mil millones de pesos y 30 de las 32 entidades federativas se han sumado al convenio de universalidad de la pensión

El Gobierno de México aporta el 50 por ciento de la inversión social para la universalidad y el 50 por ciento restante los gobiernos estatales. Uno de los que no ha firmado el convenio respectivo, resaltó, es el de Jalisco.

La funcionaria salió también al frente de quienes cuestionaron la pensión de adultos mayores. Sacó a relucir que Vicente Fox se opuso a ese apoyo a quienes dieron llegaron a la vejez sin una pensión y en el gobierno de Calderón se fijó en 500 pesos y al concluir el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, crecerá cinco veces más respecto al sexenio de Enrique Peña Nieto.

Desde 2019 es un derecho universal hasta junio pasado la recibieron 10.5 millones de personas y son más de 3 mil 850 pesos bimestrales.

Al final del sexenio, , dijo, las personas adultas mayores recibirán una pensión bimestral de 6 mil pesos aproximadamente.

La comparecencia se llevó a cabo en un salón de sesiones con una asistencia mínima. El quórum inició con 67 senadores, pero una buena parte entraba y salía.

La sesión se llevó a cabo sin incidentes, las críticas no llegaron al insulto como en la pasada comparecencia del Gabinete de Seguridad y la única nota la dio el senador de Morena, Gilberto Herrera, quién mandó “a la chingada” a la oposición.