Ciudad de México. Los familiares de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa se reunieron ayer con el presidente Andrés Manuel López Obrador, ante quien manifestaron inquietudes respecto de las indagatorias. En particular, demandaron explicación por el desistimiento de 21 órdenes de aprehensión contra presuntos involucrados en los crímenes, la mayoría de ellos militares; manifestaron su desconcierto por no haber sido consultados para el nombramiento de Rosendo Gómez Piedra como fiscal para el caso, pues consideran que “no cuenta con el perfil para el cargo”, así como un reporte de la continuidad de las indagatorias.
Los asistentes al encuentro –que se prolongó por casi tres horas a puerta cerrada en el salón Tesorería de Palacio Nacional– señalaron que el mandatario refrendó su compromiso de que no habrá impunidad.
En tanto, uno de los abogados de las familias, Vidulfo Rosales, declaró en entrevista con La Jornada que, ante los señalamientos de los padres y las madres, hay dos acuerdos: se revisarán los datos de prueba asentados en pesquisas anteriores y, si hay elementos, se buscará reactivar esos 21 mandatos de captura.
Sobre la asignación del fiscal Gómez Piedra, el presidente pidió un voto de confianza, pero, en caso de que los familiares de los normalistas no estén convencidos de su idoneidad para el cargo, podrían presentar un perfil de funcionario, el cual se consideraría ante un eventual cambio.
Respecto del reclamo de los padres por la cancelación de las 21 órdenes de arresto, Rosales detalló que el mandatario federal insistió en que estas personas no aparecen en el informe de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia para el caso Ayotzinapa (Covaj) y, “desde el punto de vista del Presidente, en la fiscalía se intentó trastocar la investigación y los compromisos que había, por eso se habrían solicitado más órdenes de aprehensión”.
Estuvieron presentes también el nuevo fiscal del caso y el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, quien preside la Covaj. Ambos fueron entrevistados al finalizar el cónclave y, por separado, coincidieron en que las órdenes de aprehensión no se limitan a los señalados en el informe de la Covaj, por lo que podrían darse más.
Gómez Piedra aseveró que se llegará a la verdad, y que el Ejército no representará un obstáculo en las investigaciones. Habrá justicia, remarcó, a pesar de quien sea, incluida la Secretaría de la Defensa Nacional. “Cero impunidad, se los dijo el Presidente y lo ratificamos”.
Encinas, en tanto, descartó una confrontación con el titular de la Defensa, general Luis Cresencio Sandoval. “Yo no me confronto más que con quienes violaron la ley”, sostuvo.
La reunión representó, además, el primer acercamiento entre el nuevo fiscal con los familiares de los 43 normalistas desaparecidos en los crímenes suscitados entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014. Se retiraron sin hacer declaraciones.
Al atender las preguntas de los reporteros que esperaban alguna declaración, Gómez Piedra –quien es cercano al presidente López Obrador– señaló que desde que asumió el cargo trabaja para litigar los expedientes que ya había avanzando el anterior fiscal, Omar Gómez Trejo, quien contaba con la anuencia de las familias y renunció tras la cancelación de las referidas 21 órdenes de captura.
Encinas indicó que hubo un diálogo “totalmente franco” y refrendó el compromiso de justicia y verdad del gobierno federal.
Agregó que está programada para la próxima semana una reunión entre los padres y Gómez Piedra y destacó también que la administración federal ha planteado al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que participan en el caso, prolongar su estancia en México “hasta cuando sea necesario”, pues su encomienda termina a fin de mes.